Siempre con una marcha más que el Oviedo, el Deportivo acabó imponiendo su superioridad para adjudicarse en Ribadeo la 65 edición del Trofeo Emma Cuervo gracias a los goles de Borja Valle y Fernando Navarro, ambos en la segunda mitad. Gaizka Garitano repitió de salida el 3-5-2 que empleó en varias ocasiones durante la pretemporada, con tres centrales -Albentosa, Sidnei y Arribas-, un centro del campo superpoblado y dos hombres arriba: Lucas Pérez y Borja Valle. El ponferradino marcó otro tanto ante su exequipo -ya había estrenado su cuenta contra Peñarol- y dispuso de alguna ocasión más como para haber ampliado su cuenta.

Las categorías se notan aunque sea en pretemporada, y los coruñeses mostraron desde el primer momento contar con una marcha más. Garitano trata de encontrar un Dépor valiente que juegue en campo contrario. El Oviedo, por su parte, quiso dejar apartada la diferencia de categoría intentando jugar de tú a tú a su rival, con el exdeportivista Toché en punta. Los fallos dominaron a los aciertos en la primera mitad, síntoma indiscutible de que aún es julio, con las piernas cargadas y las ideas por repasar. Fue un primer acto sin muchas ocasiones claras y con varias acciones duras.

La primera opción de peligro no llegó hasta el minuto 29 cuando Sidnei remató arriba un córner en el que se encontraba solo. Lucas, un incordio constante para los centrales, no llegó después por poco al remate. Se sacudió el dominio el Oviedo poco a poco. Susaeta lanzó una falta desde el lateral pero Lux detuvo con seguridad. La más clara del primer acto estuvo en la zurda de Lucas pero su vaselina se fue al larguero.

Solo hubo una sustitución al descanso, la entrada de Guilherme por Çolak . El Dépor, que mantuvo su estilo, encontró la vía. Fue en el 54. Lucas amagó con alejarse de la línea de fondo y encontró una autopista donde solo había una baldosa. Cedió atrás y del chut desde la frontal se aprovechó Borja Valle, azul las dos últimas temporadas, para batir a Juan Carlos.

Intentó reaccionar el Oviedo y Hierro movió el banquillo. Entraron Erice, Esteban, Alaniz, Pereira y Viti, y los azules parecieron encontrarse mejor con el paso de los minutos. En los momentos de mejor cara asturiana, llegó el segundo. También en una acción de calidad. Guilherme dibujó un servicio medido desde el centro el campo y Fernando Navarro aprovechó la espalda de Fernández para controlar y batir a Esteban. El gol acabó con el partido. El Oviedo siguió intentándolo, pero el Dépor ya tenía el triunfo en el bolsillo.