Los partidos deberían durar cinco minutos menos para el Deportivo: 85, en vez de los 90 reglamentados más el descuento. De esa forma se habría ahorrado los crueles desenlaces de sus dos encuentros más recientes, el de ayer en La Rosaleda y el de la anterior jornada frente al Sevilla en Riazor. En ambos se le escaparon puntos en el tiempo de prolongación. Frente a los hispalenses el definitivo 2-3 de Mercado llegó en el 92, cinco minutos después de que Vitolo hiciera el empate. De tener los tres puntos casi en la mano, el Dépor pasó a estrellarse de la manera más dura. Se fue de vacío, igual que ayer. Frente al Málaga fue capaz de igualar un 3-1 adverso e incluso tuvo alguna opción de completar la remontada con un cuarto gol, pero el que acabó marcando in extremis fue el conjunto andaluz. Otro duro golpe de última hora, esta vez con el sello de Ontiveros, y de nuevo en ese fatídico minuto 92.

Marcar tres goles fuera de casa y no sumar es un lujo que pueden permitirse muy pocos equipos y, desde luego, entre ellos no figura el Deportivo, que como cualquier aspirante a la salvación debe sacar un mejor provecho de los pocos tantos que marca. Ya no es el menos realizador de Primera, pero le sigue costando mucho perforar la meta rival. Ayer realizó nada más y nada menos que 24 remates sobre la portería de Kameni, de los cuales ocho fueron entre los tres palos. El Málaga necesitó muchísimo menos para celebrar cuatro dianas. Conectó únicamente diez remates, cuatro de ellos hacia el arco de Tyton, los de los goles.

El resultado de ayer hunde aún más al Dépor en las posiciones de peligro, aunque de momento sigue fuera del descenso gracias a la derrota del Sporting de Gijón en el Bernabéu (2-1). Una victoria de Osasuna, que esta tarde recibe al Atlético de Madrid, permitiría a los navarros igualar los diez puntos del equipo coruñés e incluso adelantarlo en la tabla. Real Sociedad, Madrid y Osasuna son los rivales hasta final de año, al margen de la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey frente al Betis. Tres citas ligueras decisivas para enderezar el rumbo en una temporada hasta ahora aciaga para el conjunto blanquiazul.