Varias veces estuvo cerca el Deportivo de ganar fuera de casa esta temporada. Sin ir más lejos, acarició el triunfo en su salida más reciente, nada más y nada menos que en el Santiago Bernabéu. Al final, por unos motivos u otros, siempre se le acabó resistiendo esa primera victoria a domicilio. Mucho tiempo, casi ocho meses, desde su última alegría de visitante, el 0-2 en El Madrigal con el que garantizó la salvación la campaña pasada. Con el cambio de año Gaizka Garitano espera romper de una vez por todas esa estadística negativa en Cornellá, donde confía en dar la "campanada" y sumar los tres puntos para abrir brecha con respecto a la zona de descenso.

"Fuera de casa no hemos ganado y lo necesitamos. Estamos ya en 2017 y a ver si empezamos una buena racha de ganar fuera. Necesitamos pegar una campanada un día y ganar. Es nuestra asignatura pendiente y es lo que tenemos en mente. Venimos de una buena racha y necesitamos pegar ese golpe que estuvimos a punto de conseguir en el Bernabéu, donde mostramos buenas sensaciones pero perdimos, y de las derrotas uno no saca nada", lamentó tras la sesión de ayer.

Elogia al Espanyol, un rival que "defensivamente trabaja muy bien" y que "en ataque tiene futbolistas de mucho nivel". "Será difícil para nosotros y esperemos que para ellos también. Tenemos una manera de jugar e intentamos llevarla a cabo donde sea", añadió Gaizka, quien recalcó su "máxima confianza" en los profesionales del club que están trabajando por reforzar la plantilla en enero.