El Deportivo ha llegado a la conclusión de que existen hechos objetivos reiterados y continuados que acreditan que hubo un falseamiento contable en las cuentas del club aprobadas sucesivamente durante el mandato del anterior consejo de administración y, en consecuencia, reclamará al equipo directivo liderado por Augusto César Lendoiro quince millones de euros, como mínimo. Ese es el perjuicio derivado, según el club, de las bases imponibles negativas, al presentar año tras año unas cuentas con beneficios cuando en realidad estaban dando pérdidas, pero hay otras contingencias que también son susceptibles de reclamación, por ejemplo la del IVA derivado del traspaso de Filipe Luis al Atlético de Madrid. Una vez recopilada toda la información que debería haber estado a disposición del actual consejo y hasta ahora no lo estaba, el Deportivo presentó esta semana en el Juzgado de Instrucción Número 3 de A Coruña un amplio dosier con documentación y un escrito para poner en conocimiento de la magistrada Margarita de Ron Cambón toda esta serie de presuntas irregularidades contables.

Entre la información aportada a la jueza se detallan cinco escrituras notariales de 2008 en las que el consejo presidido por Lendoiro reconocía una deuda con Hacienda de 96 millones de euros, más del doble de los 44 millones que se presentaron a 30 de junio para su aprobación en la asamblea de ese mismo año. Según ha concluido el Deportivo, todos los consejeros de aquel equipo directivo estaban al corriente de esas irregularidades, por lo que es muy probable que pasen a ser investigados, como lo están siendo ya Lendoiro y el exasesor jurídico Germán Rodríguez Conchado. Desde el punto de vista mercantil, los consejeros responden solidariamente, salvo que demuestren que estaban apartados de la toma de decisiones.

La causa abierta tras la denuncia de dos accionistas contra el anterior consejo por presuntos delitos societarios, en la que el Deportivo sigue personado como perjudicado, continúa en su fase de instrucción y, según fuentes del club, hasta dentro de dos meses, aproximadamente, no se sabrá si se abre la vía penal.

Desde la plaza de Pontevedra lamentan el perjuicio ocasionado en forma de impuestos por haber presentado de forma reiterada beneficios ficticios. Así lo expresó ante los accionistas el presidente, Tino Fernández, en la última asamblea celebrada el 1 de diciembre del año pasado en Palexco. "Estamos sudando tinta china. El Celta entró en concurso de acreedores cuando tenía que entrar. Si hubiésemos entrado en ese momento teníamos títulos sin deuda, porque en ese momento había facilidades para las quitas y los perdones, como hizo Las Palmas y todos los clubes que cuando se vieron ahogados no siguieron con esa huida hacia adelante. Es triste tener que pagar dos millones del impuesto de sociedades. Es pagar dos millones por mentir y el año que viene (2017), siete millones. Duele en el alma", afirmaba ante los accionistas el máximo dirigente del club.