Llegados a este punto de la temporada, Pepe Mel entiende que se han agotado ya las justificaciones. Al entrenador deportivista le gustaría detenerse en lo que ocurrirá a partir del curso que viene o en las causas que han llevado al equipo a ofrecer la imagen de los últimos partidos, pero considera que por encima de todo está ganar este mediodía a Osasuna en El Sadar (12.00 horas). "Es un momento de acción, de hechos, porque las palabras ya no valen. Es un momento para que el Deportivo como equipo diga: 'Aquí estoy yo y estoy salvado'. Que cuando termine el partido nos miremos a los ojos, nos digamos que lo hemos dejado todo, que la camiseta chorrea. Si perdemos así, estaré orgulloso. Si perdemos no haciendo eso, la sensación será terrible", reflexionó ayer el técnico tras el entrenamiento de la plantilla en la ciudad deportiva de Abegondo.

Razona Mel que el equipo, además de la permanencia en Primera División, se jugará hoy en El Sadar la "autoestima". La suya propia y la de una afición agotada después de un curso decepcionante que tuvo su colofón el miércoles con la goleada ante el Madrid. "En primer lugar, nos jugamos la salvación, que es lo más importante, y luego, la autoestima, la sensación de ser buenos profesionales, porque le debemos muchas al deportivismo. La gente nos exige con razón, tenemos una deuda permanente con la afición", manifestó ayer el técnico.

Reconciliarse con la grada figura entre las prioridades, porque al entrenador deportivista no se le escapa que las últimas actuaciones han abierto una brecha con los aficionados. "No es que esté de acuerdo, es que lo entiendo", respondió ayer Mel cuando se le cuestionó sobre las acusaciones de falta de actitud hacia los suyos. "No porque el Madrid te meta seis, el Madrid te puede ganar. Son otra serie de cosas las que tenemos que hacer para que la gente no se enfade. El público no es tonto y se rebela. Tenemos una gran oportunidad para que la gente descanse y resetee", añadió.

A partir de entonces, con la "gente tranquila" podrá empezar a hablarse del futuro que aguarda al Deportivo.