El entrenador de la Unión Deportiva Las Palmas, Quique Setién, dijo ayer que espera despedirse del equipo amarillo con una victoria ante el Deportivo. El técnico cántabro ha anunciado que presentará un equipo "competitivo" porque, aunque el partido resulte intrascendente para ambos equipos, en su ánimo y en el de sus jugadores está que los amarillos acaben con su mala racha de resultados fuera de casa y ganen este partido "como sea" para marcharse "tranquilo". Setién celebra que no sean juez en este encuentro, porque el Deportivo ya consiguió la permanencia la semana anterior, y solo estará en juego "la honra" de ambos equipos, porque el conjunto coruñés "también querrá terminar bien ante su afición".

El técnico del equipo grancanario ha restado importancia a una discusión que tuvo con sus jugadores en el entrenamiento del jueves, y cree que es "normal" que no haya "nivel de tensión competitivo", pero cree que cuando hoy empiece el partido, "todos los jugadores saldrán a ganar". El preparador cántabro se va con "tristeza" de la Unión Deportiva, y ha reconocido que aún no es del todo consciente de que tendrá que marcharse: "Hasta que no empiece a hacer la mudanza en casa, no me daré cuenta".

Setién no ha querido confirmar si fichará por el Betis, como casi se da por hecho desde Sevilla, y también ha asegurado que explicará próximamente los motivos de su no renovación por la Unión Deportiva.

El técnico montañés se va "contento" de la isla y "satisfecho por el trabajo realizado", ya que ahora tiene un "prestigio" que antes no tenía, aunque cree que hubiera necesitado más tiempo para afianzar su modelo de juego. "Ha sido un año en el que ha habido momentos difíciles y duros con los jugadores, y de ellos conmigo, pero es algo normal", sostiene. Con respecto a la renovación de Kevin-Prince Boateng, confirmada esta semana por el club isleño, ha dicho que se la ha "ganado" por su rendimiento, y por el "carácter" que ha tenido y que no tuvieron otros jugadores.