El Deportivo parte de 24 millones de euros para empezar a formar la plantilla de la próxima temporada, es el plan A al que aludió Tino Fernández en la rueda de prensa que ofreció el pasado viernes en Riazor; es la misma cantidad de la que dispuso en el curso que está a punto de finalizar para conformar la plantilla. Tiene el club coruñés la posibilidad de contar con una cantidad mayor, pero depende en buena parte del acuerdo al que pueda llegar con Hacienda para cumplir con su obligación de satisfacer el acuerdo singular firmado en marzo de 2014 y los 21 millones de euros recalificados como deuda privilegiada por el Tribunal Supremo, que tendrá que abonar en el plazo de cinco años.

La intención de Tino Fernández, el presidente, era alcanzar un acuerdo para poder duplicar incluso el límite salarial de la temporada 2017-18, pero las negociaciones que mantiene con diversos "actores del mundo financiero" todavía no fructificaron. El máximo dirigente de la entidad blanquiazul reconocía la pasada semana que el club necesita del "acuerdo con Hacienda", para mantener el plan inicial que les permita fortalecer la plantilla, sin embargo, todavía no existe. Por eso la dirección deportiva está trabajando "con un plan A y un plan B"; el A es disponer de la misma cifra que la pasada temporada, pendiente de ampliar en función de los ingresos que obtenga la entidad; el B, el que permitiría mejorar sensiblemente el tope salarial.

En el club hay cierta intranquilidad, que no nerviosismo, porque aguardan mejorar los 24 millones de que disponen ahora. Superar esa cifra sería un éxito para los dirigentes, ya que entienden que lograron captar más recursos económicos que la pasada temporada, pero con el problema del aumento de la deuda privilegiada. En estos momentos sería de 29 millones, pero la sentencia del Supremo la elevó a 50 millones, lo que supuso que la subordinada descendiese en 14 millones. La diferencia entre una y otra está en que la privilegiada no está sujeta a quita y la subordinada sí, además de disponer de 17 años para pagarla.

Con esos 24 millones negocia la dirección deportiva la formación de la plantilla para la próxima temporada, aunque sin excesivas prisas, porque "estamos empezando junio", aseguran y "en poco tiempo podríamos disponer de más recursos", dicen fuentes del club. El año pasado, Gaizka Garitano tenía ya la plantilla cerrada cuando inició la pretemporada, era la primera vez que sucedía en los últimos siete años. Pepe Mel podría no correr la misma suerte, mas la espera podría suponer la llegada de algún futbolista que marcase diferencias. Ya lo dijo Tino Fernández, este año el Deportivo apostará "más por la calidad que por la cantidad".