El Deportivo puja fuerte por dos futbolistas que supondrán un refuerzo considerable para la actual plantilla, uno es extracomunitario, siguiendo la línea que avanzó Tino Fernández, el presidente, en su última comparecencia pública en Riazor, cuando avanzó que la intención en este mercado es fichar "más calidad que cantidad". La dirección deportiva sabe que la base de la plantilla está hecha con los jugadores que tienen contrato, además de la incorporación definitiva de Guilherme, por el que negocian con el Udinese. El centrocampista brasileño quiere quedarse, el club coruñés quiere que se quede, solo faltan cerrar los flecos pendientes con el club italiano. Este exigía cinco millones por su traspaso, una cifra que está lejos de lo que pueden pagar los dirigentes blanquiazules, que propusieron otras fórmulas que estudian en Udine. Puede ser el del centrocampista el segundo fichaje para el nuevo curso, tras el de Cartabia, realizado en enero.

Viene de muy atrás la intención de hacerse con los derechos federativos de Guilherme, pues ya con el inicio de 2017 la dirección deportiva había propuesto su contratación definitiva, un planteamiento avalado por los técnicos de entonces y que encontró el respaldo de los actuales. El jugador acaba de cumplir 26 años y puede convertirse en una de las referencias del equipo blanquiazul en la nueva temporada, pero con unas aspiraciones mucho mayores que las que tuvo en la campaña pasada. En realidad, con unas aspiraciones similares toda vez que el equipo estaba diseñado para quedar por encima del décimo puesto. Sin embargo, las adversidades jugaron en contra de los blanquiazules. Primero fue el fichaje de Lucas por Arsenal tras haber disputado la primera jornada de Liga; segundo, la lesión de Joselu -recambio del de Monelos- el día de su debut; y tercero, la marcha de Babel a Turquía en el mercado de invierno, cuando ya había un acuerdo de palabra para que continuase hasta final del ejercicio.

Este año el club quiere retener a sus principales valores -puede marcharse cualquiera que llegue con la cantidad que figura como cláusula de rescisión- y los más valorados son Andone -dijo que quería seguir-, Sidnei -cuyo final de temporada no fue bueno- y Juanfran. Todos pueden salir si el equipo que los pretenda abona la cifra que figura en sus respectivos contratos. El lateral madrileño llegó a comentar tras el mercado de invierno que se estaba planteando una salida una vez finalizada la temporada porque estaba cansado de no tener aspiraciones. Sin embargo, una vez logrado el objetivo -casi contra la campana- y con las perspectivas que tiene el club, parece que Juanfran seguirá, aunque ayer de nuevo volvieron a salir rumores sobre otro intento del Barcelona de hacerse con sus servicios. En su momento Tino Fernández dijo que podría marchar a cambio de 8 millones. El Deportivo tiene la capacidad de decidir, aunque siempre prefiere hacerlo tras conocer la opinión del futbolista, pues no quiere a nadie a disgusto.