Guilherme está cerca de convertirse en el segundo refuerzo del Deportivo 2017-18, pero ayer todavía no estaba cerrado el acuerdo con el Udinese, club al que pertenece el futbolista y con el que la entidad blanquiazul firmó un acuerdo en el que figura una cláusula en la que se especifica que los coruñeses tienen de plazo hasta hoy para hacer efectiva la compra del centrocampista brasileño. La diferencia parece estar en el dinero que solicita el club italiano, que es el que se estableció en el contrato en el momento de la cesión el verano pasado -cinco millones de euros-, una cantidad que desde la plaza de Pontevedra pretenden rebajar.

La intención del consejo de administración deportivista es hacer lo que ya realizaron con otros futbolistas, Andone y Juanfran entre ellos; esto es rebajar la cantidad y ceder una parte del contrato al club de procedencia, que también sacaría un beneficio en el caso de un posterior traspaso del centrocampista. El futbolista firmará por el cuadro deportivista por cuatro temporadas, es decir, hasta junio de 2021, una vez los directivos de ambos equipos alcancen el acuerdo definitivo, que tendrá que producirse hoy.

La dirección deportiva considera prioritaria la contratación de Guilherme, tal como avanzó LA OPINIÓN en enero pasado cuando el futbolista empezó a hacerse dueño del centro del campo. Tal es así, que considera que el jugador brasileño puede ofrecer un rendimiento muy superior al que se le vio a lo largo de la temporada que está a punto de finalizar. El centrocampista comenzó como titular, en parte porque Celso Borges se había incorporado más tarde, y cumplió una primera vuelta irregular, pero con el inicio de la segunda parte del campeonato se convirtió en el jefe de la medular blanquiazul.

El propio jugador había comentado al principio de la campaña que era un futbolista al que le costaba arrancar en cada curso, como demostró posteriormente, pero una vez asentado se convirtió en un fijo tanto para Gaizka Garitano como para Pepe Mel. El madrileño, que seguirá el frente del equipo una temporada más, es uno de los principales valedores del fichaje del centrocampista brasileño, ya que lo considera clave en el equipo que diseñará para iniciar la cuarta temporada consecutiva en Primera División, tras el descenso de forma consecutiva en las dos anteriores en la elite.

Con Guilherme y Fede Cartabia, firmado en enero, son ya dos los futbolistas que reforzarán la plantilla blanquiazul en el nuevo curso, aun pendiente de conformar. La dirección deportiva sigue a la espera de conocer con qué dinero podrá contar definitivamente, de ahí que las incorporaciones se puedan dilatar un poco más que hace un año. Como anunció Tino Fernández hace unas semanas, la dirección deportiva parte de la base del año pasado -24 millones-, pero esa cantidad es susceptible de doblarse si el club consigue solucionar con Hacienda la deuda privilegiada, que se incrementó en 21 millones de euros más, tras la decisión de la Audiencia Nacional del pasado mes de abril. Si la directiva alcanza un acuerdo beneficioso -negocia con "numerosos actores"- el límite salarial podría ser muy superior al que la LaLiga le asignó la pasada temporada.