La primera jornada de trabajo del Deportivo en Vilalba finalizó con una mala noticia, la lesión de Juanfran Moreno, uno de los nuevos futbolistas designados para lucir el brazalete blanquiazul en la temporada 2017-18. El lateral estrenó capitanía con un inesperado percance, ya que en un lance fortuito del juego, durante el tramo final de la sesión, recibió una patada en la espinilla y tuvo que abandonar el césped de A Magdalena. Según informó el club, no está previsto que sea sometido a pruebas de imagen. Tras la primera exploración solo se trata de una fuerte contusión, muy dolorosa, pero que en principio no debería apartarle del estreno liguero frente al Madrid del domingo 20 en Riazor. Pedro Mosquera, el único de los capitanes de la pasada temporada que continúa en la plantilla del Deportivo, compartirá la responsabilidad de lucir el brazalete con otros cuatro compañeros que se estrenan en esa función: Celso Borges, Sidnei Rechel, Fernando Navarro y el propio Juanfran.

El cuarteto de líderes de la anterior campaña, formado por Germán Lux, Laure Sanabria, Álex Bergantiños y Mosquera, se convierte ahora en un quinteto. De los cinco, el centrocampista coruñés es el único que ha sido designado directamente por Pepe Mel. Los otros cuatro han sido elegidos por sus compañeros. La antigüedad en el club, en este caso, no ha sido un criterio decisivo en la selección, ya que el jugador que lleva más tiempo en el Dépor, Luisinho Correia, no figura en la nueva lista de capitanes. El portugués llegó a Riazor en 2013, un año antes que Juanfran y Sidnei. Borges aterrizó en A Coruña en enero de 2015, tiempo suficiente como para haberse convertido en uno de los hombres fuertes dentro del vestuario, y también en uno de los más respetados. El costarricense será el segundo capitán. El tercero en ese orden de preferencias será Sidnei; el cuarto, Juanfran; y el quinto, Navarro. El veterano lateral izquierdo, de 35 años, afronta su tercera campaña en Riazor con el objetivo de seguir ayudando tanto dentro como fuera del campo.

Ese quinteto de elegidos, que Mel mantuvo en secreto hasta ayer, encabezó la expedición blanquiazul que ayer llegó a Vilalba para concentrarse y convivir durante esta semana antes de viajar el viernes a Canarias para afrontar el sábado contra el Tenerife (21.30 hora peninsular) el último encuentro amistoso de preparación. Tras disfrutar el domingo de una jornada de descanso, el técnico madrileño reunió a su plantilla ayer por la mañana en Abegondo, donde dirigió un último ensayo antes de viajar a la localidad lucense. Se llevó a 24 futbolistas, quienes tras instalarse en el Hotel Attica 21 de Vilalba, por la tarde completaron el primer entrenamiento en A Magdalena.

Además de Juanfran, que recibió ese fuerte golpe en la espinilla, Mosquera también sufre problemas físicos y ayer tuvo que trabajar al margen del grupo a consecuencia de la contusión en la rodilla derecha que sufrió el pasado sábado en Riazor durante el encuentro del Teresa Herrera frente al West Bromwich Albion. Fabian Schär, por su parte, tuvo que parar durante unos minutos para que le vendaran un tobillo.

Visita de la psicóloga Ramírez

Para hoy está prevista una única práctica matinal, mientras que mañana volverá a haber doble sesión. En ambas jornadas la plantilla se reunirá con la psicóloga Patricia Ramírez para afianzar aspectos como la cohesión y la fortaleza del grupo. El jueves la actividad volverá a ser únicamente por la mañana. En total, siete entrenamientos, contando los dos de ayer, para ultimar la preparación física y táctica en la penúltima semana previa al arranque de Liga contra el Madrid, una cita para la que Mel no podrá contar con Emre Çolak, sancionado, ni con Fede Valverde, según lo pactado con el Madrid en su contrato de cesión.