Pepe Mel aprovechó el entrenamiento de ayer en A Magdalena, el quinto y último que dirigió sobre el césped vilalbés, para insistir en algunos de los aspectos tácticos que más ha machacado a lo largo de la pretemporada. Por ejemplo, la importancia de salir con el balón bien jugado desde atrás. Dividió a sus jugadores en dos equipos de once para exigirles cinco toques, como mínimo, antes de conectar con el delantero (Florin Andone, en un equipo; y Borja Valle, en el otro). Fue un ensayo muy exigente, que finalizó con varios partidillos en espacio reducido, antes de despedirse del campo lucense, donde el técnico reunió a sus jugadores para dedicarles la última charla en Vilalba. Desde allí saldrá el equipo esta mañana en autobús hacia Santiago para embarcar rumbo a Canarias. Mañana, contra el Tenerife, el Dépor jugará el último amistoso de preparación con la mente puesta en el estreno liguero frente al Madrid.

Tras finalizar la concentración en Vilalba, el equipo entra en modo competición. Solo quedan diez días para el estreno y eso aumenta la tensión. Pronto empezará lo serio y todo el mundo está más alerta. "Ya estamos listos para competir", resumió Guilherme dos Santos tras completar el último entrenamiento en A MagdalenaGuilherme dos Santos . Tiene ganas de que empiece la Liga y, como es lógico, a medida que se acerca el arranque empieza a sentir "la ansiedad y lo nervios en la barriga".

La meta, entre el puesto 8 y el 12

La convivencia que desde el lunes hizo el equipo en Vilalba sirvió para reforzar vínculos entre los jugadores que ya formaron parte de la plantilla de la campaña anterior y también para facilitar la adaptación de los recién llegados. "Está siendo perfecto. Los que llegaron nuevos han sido bienvenidos y ya somos todos amigos. Queremos empezar la Liga haciendo un buen partido en casa", deseó Guilherme. Es ambicioso y optimista a la hora de situar el listón el Deportivo de cara a la próxima temporada. Tanto, que ve al equipo coruñés en disposición de pelear en la zona media por los puestos "del octavo al duodécimo". "Mi pensamiento es que tenemos equipo para eso", aseguró el brasileño.

La psicóloga Patricia Ramírez, una profesional que ya había trabajado con Pepe Mel en etapas anteriores, visitó esta semana a la plantilla para fomentar la cohesión, la cooperación y trasladar al equipo un código de valores en el que los objetivos grupales estén siempre por delante de los individuales. Así quiere funcionar el Dépor, como un equipo con mayúsculas en el que todos remen en la misma dirección. El aspecto mental es tan importante como el futbolístico y, en el caso de Guilherme, su nueva situación personal, ahora que ya es propiedad del DeportivoDeportivo, le ayuda a afrontar la nueva temporada "más calmado y con más confianza". La pasada campaña estaba cedido y desconocía si iba a seguir. Ahora ya sabe que su futuro está en A Coruña y eso supone una dosis extra de tranquilidad para el brasileño, que quiere responder a las expectativas haciendo un gran temporada.