El entrenador de la Real Sociedad, Eusebio Sacristán, no quiere confianzas para el partido de mañana en Riazor, donde su equipo se juega el liderato, y recomienda "recordar bien la goleada del año pasado" en un estadio en el que los donostiarras cayeron por 5-1. "El año pasado sufrimos un varapalo muy grande. Cuando jugamos ese partido estábamos en un gran momento, muy bien, y por eso debe ser un toque de atención para nosotros", señaló el preparador vallisoletano, que considera que la Real solo alcanzará el éxito si "compite y respeta a los rivales".

Enfrente espera un Dépor que, aunque sólo ha sumado un punto en las dos primeras jornadas, desprende buenas sensaciones, como reconoció un Eusebio que ve a los coruñeses "contentos tras el cierre de mercado y la plantilla que han hecho". El técnico desveló que la principal arma del equipo de Pepe Mel es que tiene "gente determinante arriba, lo que nos obligará a impedir que contacten con ellos".

Por otra parte, Eusebio restó importancia al hecho de empezar a jugar a partir de ahora entre semana por la Europa League, lo que condiciona las convocatorias de cada jornada, ya que cuenta con una plantilla "compensada, de nivel de calidad parejo" y tiene, por tanto, dónde elegir.

El entrenador realista además reveló que Juanmi y Rubén Pardo estarán en condiciones de jugar en Riazor, al contrario que Mikel Oyarzabal, que está lesionado en un tobillo, no se ejercitó con el grupo y lo tiene "muy difícil".