Quince remates, cuatro entre los tres palos que se traducirían en los goles de la Real Sociedad, son demasiados para un Deportivo que ha arrancado el campeonato cuestionado por su debilidad defensiva. El conjunto blanquiazul es el más goleado de la categoría tras las primeras tres jornadas. Encajó tres ante el Madrid, dos frente al Levante y cuatro el fin de semana en Riazor contra la Real. Con ello se han rebajado las expectativas depositadas en la plantilla después de la ambiciosa estrategia del club durante el mercado de verano.

La defensa parece en este arranque de temporada la línea más débil de un Deportivo que sin embargo tampoco ha ofrecido síntomas convincentes de solidez colectiva. Pepe Mel ha reconocido el obstáculo que representa haber encajado nueve goles en tres partidos para las aspiraciones de crecimiento del equipo. La mayor prioridad del técnico se centra tras la goleada encajada ante la Real Sociedad en minimizar los errores defensivos y encontrar la fórmula de aprovechar el potencial ofensivo del que dispone tras las incorporaciones veraniegas.

Ayer durante el entrenamiento en la ciudad deportiva de Abegondo se esforzó en corregir los errores mostrados frente a la Real y centró sus instrucciones y los ejercicios en los mecanismos defensivos necesarios para que el equipo conceda menos oportunidades al rival. De hecho han sido las ocasiones permitidas a los contrarios las que más han lastrado al conjunto blanquiazul. Ante la Real fueron 15 los remates concedidos, confirmando la tendencia de las dos primeras jornadas.

Después de tres partidos, el Deportivo es el segundo equipo de la categoría que más oportunidades facilita. Contabiliza 55, algo más de 18 por partido, y solo lo supera el Alavés en ese apartado, otro conjunto en problemas en este arranque de temporada.

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El Dépor prepara su visita al estadio del Betis

El partido ante el Betis del sábado se presenta así como una prueba no solo a la capacidad del equipo para corregir los errores que lo han minado en este primer tramo de la Liga sino también para confirmar las expectativas depositadas en él. Es muy probable que Mel introduzca cambios en el equipo para visitar el Benito Villamarín y es presumible también que modifique la manera de encarar el partido.

Por lo visto ayer en Abegondo se anticipa una propuesta con más reservas, centrada en anular el caudal ofensivo del Betis con líneas más retrasadas y juntas al borde del propio área. El contragolpe y la velocidad se atisban como las armas de los deportivistas.