Nunca hasta esta semana Pepe Mel había tenido la posibilidad de alienar juntos a sus tres jugadores de ataque más importantes. Lo más cerca que estuvieron Adrián, Lucas y Andone de jugar juntos fue contra el Alavés, pero una inoportuna lesión de última hora del asturiano frustró los planes del técnico. El delantero se perdió los últimos cuatro partidos, pero esta semana ha vuelto a entrenarse con el grupo y su reaparición parece cercana.

Todavía sin el alta médica, Adrián encadenó ayer dos sesiones consecutivas junto al resto de sus compañeros y probablemente llegue en condiciones de disputar el partido del lunes contra el Girona. Su regreso abre el abanico de posibilidades de Mel para la delantera al tener también disponibles a Lucas y Andone.

El coruñés forzó para entrar en la convocatoria el domingo pasado contra el Eibar a pesar de sus molestias en un muslo, fue el entrenador el que asumió el riesgo de la decisión, pero ha arrancado la semana al mismo ritmo que el resto de la plantilla. Tras su suplencia en Ipurua, Lucas recuperará el papel de delantero titular que le había otorgado Mel por delante de Andone.

El delantero rumano es sin embargo el principal damnificado por la recuperación de Adrián y Lucas. En los últimos partidos perdió su protagonismo y solo regresó a la titularidad en ausencia del coruñés contra el Eibar. Solo en una ocasión jugaron los dos juntos.

Fue contra el Alavés, precisamente el encuentro en el que Adrián no pudo participar por lesión. Esa circunstancia alimenta las dudas sobre la posibilidad de que Mel decida alinear juntos a los tres. Para ello debería modificar el sistema que ha utilizado en los compromisos más recientes y regresar a la variante con dos delanteros que siempre colocó como su preferida.

Eso implicaría sacrificios, como prescindir del papel de Emre Çolak en la mediapunta. El turco no se ha podido entrenar todavía esta semana debido a un esguince de tobillo y podría allanar al técnico la posibilidad de regresar a la propuesta con dos jugadores en punta.

Menos problemas tendría para volver a acomodar a Adrián en el equipo después de su ausencia. El asturiano jugó sus partidos partiendo desde la banda, pero al mismo tiempo aportó el equipo una dosis de calma y pausa en el ataque que ha faltado en los partidos más recientes de los deportivistas.

La vuelta del asturiano al equipo titular dejaría a Fede Valverde con pocas opciones de seguir jugando de inicio. El uruguayo, escorado hacia el costado izquierdo, se ha esforzado por equilibrar al equipo y al mismo tiempo participar en las jugadas incorporándose desde el centro, pero no ha terminado de adaptarse del todo a la posición.

El ataque representa ahora mismo la principal preocupación de Mel, que no hace mucho reconocía que los problemas en defensa estaban lastrando al conjunto deportivista. Eran demasiados los goles que encajaban los blanquiazules, pero la sangría se consiguió frenar en los encuentros más recientes. El problema, sin embargo, se ha trasladado al ataque. En Eibar el equipo acusó sus lagunas en la creación y ya no es que padeciera la falta de puntería que se experimentó en otras ocasiones, sino que directamente no fue capaz de generar oportunidades ante un Eibar más débil de lo habitual.