Los síntomas para el Deportivo son de mejoría en las últimas semanas. Dos victorias consecutivas en casa y el empate logrado en Eibar le han permitido asomar la cabeza y espantar parte de las dudas que lo persiguieron desde el inicio del campeonato. El conjunto de Pepe Mel, y no menos el propio técnico blanquiazul, necesitan sin embargo un resultado que les permita tomar aire definitivamente y asomarse a la zona templada de la clasificación. Ante el Girona esta noche (21.00 horas) en el estadio Abanca Riazor tendrán la oportunidad de escalar posiciones ante un rival situado también en la parte comprometida de la tabla.

Hasta ahora el Deportivo ha respondido bien en circunstancias parecidas y frente a contrarios de un potencial similar. Se impuso al Alavés en un compromiso determinante después de un inicio de curso titubeante y repitió frente al Getafe para abortar la primera crisis seria de la temporada. Aquel triunfo permitió a Mel conservar su puesto al frente de la plantilla y ganar tiempo en busca de lo que realmente pretende en el equipo.

El madrileño asegura que cada vez está más cerca de conseguirlo, que con el paso de las jornadas y la tranquilidad que han aportado los resultados recientes ha podido trabajar con más calma. Por el camino ha ido recuperando jugadores hasta alcanzar el partido de esta noche con todos disponibles a excepción de Rubén y Carles Gil.

Mel recupera para recibir al Girona a Mosquera y Adrián, pero la alineación no será muy diferente a la de las jornadas más recientes. La única duda radica en la participación de un mermado Fede Cartabia y la utilización de Lucas y Andone en la delantera. Esa opción haría que Çolak se cayese del once. El argentino arrastra molestias musculares y podría tener descanso esta noche. Su ausencia empujaría al entrenador deportivista a emplear un rombo en el centro del campo formado por Guilherme, Borges, Valverde y Çolak.

La participación de Cartabia, sin embargo, no descarta del todo al turco, que podría encontrar continuidad en el equipo titular en el caso de que Mel descarte la posibilidad de alinear a la pareja de delanteros. Después de encadenar tres partidos consecutivos en el once, Çolak está más cerca de lo que espera de él el técnico, según reconoció el madrileño. Su papel agrada al entrenador deportivista, igual que el de un Valverde escorado hacia la banda que en Eibar apenas encontró participación.

También volverá a apostar por un Francis que convenció en Ipurua en el que fue se estreno en Primera División. La apuesta supone un riesgo y también un órdago hacia la dirección deportiva, que orilló la contratación de un portero durante el verano.

La alineación tendrá el desafío de conseguir una victoria que permitiría encadenar tres consecutivas por primera vez desde hace siete años.