Siete equipos españoles salieron vivos del Santiago Bernabéu esta campaña: Valencia, Levante, Betis, Barça y Villarreal en Liga, más Fuenlabrada y Numancia en Copa. Los dos clubes de inferior categoría lograron allí sendos empates (2-2) en el torneo del KO. Cayeron eliminados, pero se marcharon con la satisfacción de no haber hincado la rodilla en un feudo tan complicado. Ese será el domingo el objetivo del Deportivo, que aspira a arañar un resultado positivo en uno de los estadios más inaccesibles del mundo para iniciar con buen pie la segunda vuelta. Saúl García, a las órdenes de Cristóbal Parralo hasta el pasado día 8, lo logró en su reciente debut con el NumanciaSaúl GarcíaCristóbal Parralo , el quinto equipo de Segunda en el que juega cedido por el Dépor. No solo empató en el campo blanco, sino que redondeó su feliz actuación con una asistencia de gol, la del 2-2 definitivo. A su juicio, el aspecto psicológico es clave en un escenario tan singular. Quien salga derrotado de antemano, está condenado: "Si no crees, las posibilidades son nulas".

El primer paso es convencerse de que realmente es posible y, a partir de ahí, "tratar de hacer un partido casi perfecto y confiar en que el Madrid no esté acertado". "Hay dos formas de jugar en el Bernabéu: presionando desde el primer momento e intentando no dejarles salir con el balón, que es una opción posible, pero más difícil; y la otra forma es encerrarse atrás, tener las salidas claras y correr bien a la contra -argumenta Saúl-. Cualquier opción es válida. Nosotros planteamos el partido para encerrarnos atrás y salir a la contra, que fue cuando más problemas les creamos por sus desajustes. A la mínima que robábamos, encontramos pases sencillos y pudimos salir bien al contraataque".

El miércoles de la semana pasada, en la vuelta de la eliminatoria de Copa contra el Numancia, Zinedine Zidane presentó un once plagado de suplentes tras el 0-3 de la ida. El domingo, contra el Dépor, la alineación blanca será mucho más potente. "Contra nosotros salieron varios que no estaban jugando habitualmente. Con los futbolistas que tienen, en cualquier jugada te pueden cambiar el partido con una acción individual. El Madrid concede poco aunque esté en un mal momento. Al final, no depende solo del buen partido que puedas hacer tú porque cualquier jugador de esa calidad te puede marcar la diferencia. Tienes que intentar hacer las cosas lo mejor posible -recomienda el cántabro- y que ellos no tengan el día o no finalicen esas acciones".

Fundamental en el Bernabéu es "hacer largo el partido", como el Numancia la semana pasada: "Si se rompe desde el primer momento y encajas muy pronto, cambia todo. La clave es intentar estar siempre en el partido, no recibir gol pronto, hacer el encuentro largo y que ellos también se pongan nerviosos con un resultado no favorable". Saúl escuchó ese runrún de la afición blanca, que "no se esperaba ese marcador". "Una parte de la grada les recriminó que un equipo de Segunda les empatase", recuerda el cántabro, convencido de que el Dépor también está capacitado para sobrevivir en el Bernabéu: "Seguro que va a salir con ganas de sumar los tres puntos, sabiendo que es difícil, pero que, si se hacen las cosas bien, hay opciones".

A sus 23 años y con una temporada más de contrato con el Deportivo, Saúl solo piensa en "ayudar al Numancia", donde lo han acogido "muy bien desde el primer momento". En Soria está su futuro inmediato, aunque no pierde la ilusión por triunfar algún día en Riazor: "La ilusión nunca hay que perderla. Tienes que trabajar para ti mismo y, si no llegan las oportunidades en un sitio, que lleguen en otro. Esto sigue y no se acaba el mundo en el Dépor, ni en el Numancia, ni en ningún otro equipo. Ahora mismo pienso en disfrutar y en jugar. Lo que tenga que venir, ya vendrá".