El otro movimiento en el cierre del mercado fue la confirmación de la salida de Costel Pantilimon. El Deportivo comunicó ayer por la tarde la marcha del portero después de acordar con el Watford la finalización de la cesión del rumano. El guardameta se despidió el martes de sus compañeros y abandonó la ciudad para regresar a Inglaterra en busca de un nuevo destino, que será el Nottingham Forest. El club blanquiazul agradeció a Pantilimon su "trabajo y profesionalidad" durante los cinco meses que ha formado parte de la plantilla.

En ese tiempo, el rumano disputó un total de seis partidos de Liga y uno de Copa del Rey, pero su rendimiento estuvo lejos del esperado. Incorporado como un medida de urgencia después de la lesión de Rubén Martínez a finales de agosto, Pantilimon no solucionó los problemas en la portería del equipo. Por este motivo, el club decidió en el mercado de invierno fichar al guardameta ucraniano Maksym Koval. Junto a las llegadas de Bóveda y Krohn-Dehli, la entidad necesitaba liberar fichas y la salida de Pantilimon se presentaba como una de las más probables dado que apenas iba a contar con oportunidades y de que con su presencia el equipo deportivista contaba con cuatro guardametas en la primera plantilla.