Cristóbal Parralo se despidió esta mañana del club tras ser destituido como entrenador del primer equipo el pasado domingo. El ya extécnico blanquiazul agradeció la oportunidad que le dieron de entrenar en Primera División y se marchó sin lanzar ningún reproche. Tampoco hacia los jugadores, señalados al igual que el entrenador por los malos resultados en una temporada que, tras la llegada de Clarence SeedorfClarence Seedorf, contabiliza ya tres inquilinos en el banquillo. "No voy a reprochar absolutamente nada a los jugadores. Mi destitución es porque los resultados no han acompañado. Es lo único que me puedo reprochar, no podemos reprocharnos el trabajo ni la entrega", reflexionó esta mañana en la ciudad deportiva de Abegondo.

Cristóbal también subrayó que no se arrepiente en absoluto de haber aceptado la propuesta del club de hacerse cargo del primer equipo después del cese de Pepe Mel Pepe Mel. "Yo no me arrepiento en absoluto. Ha sido una experiencia, lo único que lamento es que los resultados no han acompañado", aseguró.

El exentrenador deportivista también explicó que ha rechazado la propuesta del club de continuar ligado al Deportivo. "El presidente, cuando me comunicó el cese, me dijo que no quería que me marchara, pero ahora mismo no me veo continuando en el club. Soy entrenador y lo que quiero es entrenar. Han sido meses duros y difíciles y lo que quiero es descansar, resetearme y a partir de ahí ver qué me depara el futuro", justificó.

Cristóbal estuvo acompañado durante su despedida por el presidente deportivista, Tino Fernández, que agradeció su trabajo y al mismo tiempo se refirió a su destitución cuando días antes había asegurado que continuaría en el cargo pasase lo que pasase en AnoetaAnoeta. "Para nada pensaba el jueves que podía pasar lo que pasó. A veces puedes tener un mal resultado pero otra sensación. Tuvimos los mismos puntos jugando contra el Atlético en casa que en Anoeta, pero salimos de otra manera", expuso.