Clarence Seedorf ha decidido programar una sesión doble de entrenamiento en el regreso al trabajo de la plantilla después de la dolorosa derrota del sábado ante el Alavés. El entrenador holandés dirigió esta mañana una exigente sesión en las instalaciones de la ciudad deportiva de Abegondo y ha citado al equipo de nuevo esta tarde para comenzar a preparar el encuentro del viernes contra el Espanyol en Riazor. En la vuelta a los entrenamientos no estuvieron Fede Valverde, lesionado, ni Andone, que realizó trabajo específico en el gimnasio.

Seedorf recupera así las dobles sesiones dobles que fueron protagonistas en su primera semana al mando de la plantilla. El técnico también decidió en esos primeros días que los jugadores y el cuerpo técnico comieran juntos.

Sobre la situación del equipo se pronunció esta mañana Eneko Bóveda, que negó que se encuentren sentenciados. "El equipo no es un alma en pena ni está muerto", subrayó el defensa. El lateral, reconvertido a central en los últimos partidos, reconoció sin embargo que la situación en la tabla afecta a los ánimos. "Todos somos conscientes de que cada oportunidad que perdemos está más difícil nuestro objetivo", admitió.