El Deportivo se estrenará el domingo en el Wanda Metropolitano con la difícil misión de salir vivo del nuevo estadio del Atlético de Madrid, algo que solo cuatro equipos lograron esta temporada en Liga: Barcelona, Villarreal, Madrid y Girona. Ninguno ganó. Los cuatro empataron en el feudo del equipo rojiblanco, invicto todavía en casa en el torneo doméstico. Ni una sola derrota, para un balance total de diez triunfos y cuatro igualadas. La más reciente, ante el Girona, un debutante en Primera División que se ha convertido en la gran revelación del campeonato por su alto nivel competitivo, como demostró el pasado 20 de enero en el Wanda (1-1). Griezmann adelantó al Atleti antes del descanso y Portu aprovechó un despiste tras un mal despeje para firmar el empate definitivo a un cuarto de hora del final.

Ese reciente resultado del conjunto de Pablo Machín es un ejemplo, todavía fresco, de que no es imposible puntuar en el estadio rojiblanco pese a la extrema dificultad que siempre conlleva enfrentarse al Atlético de Madrid, y más en su campo. El 1-1 que logró el Girona sirve de espejo para el Deportivo, que en la primera vuelta ya plantó cara a los colchoneros en Riazor, aunque sin premio. No mereció perder, pero Thomas aprovechó un error del guardameta rumano Costel Pantilimon para decidir el encuentro marcando en el último minuto desde la frontal del área a la salida de una falta.

Siete triunfos seguidos en casa

El Atlético atraviesa un momento especialmente dulce en su estadio. Desde que cedió aquel empate ante el Girona, ha enlazado cinco victorias consecutivas -siete, contando los dos compromisos de Liga Europa- en las que ningún rival ha sido capaz de marcarle gol. En Liga, se deshizo consecutivamente de Las Palmas (3-0), Valencia (1-0), Athletic (2-0), Leganés (4-0) y Celta (3-0). También en el torneo continental venció sin encajar, primero ante el Kobenhavn danés (1-0) y luego contra el Lokomotiv ruso (3-0) para encarrilar su pase a cuartos de final.

Con 34 puntos sumados en casa el Atlético es el tercer equipo de la Liga más fuerte como local, solo por detrás del Barcelona (38) y del Valencia (35). Esa fiabilidad rojiblanca contrasta con la debilidad del Deportivo, especialmente en sus desplazamientos. El equipo coruñés solo arañó seis puntos en sus catorce compromisos disputados a domicilio gracias a la victoria en Las Palmas (1-3) y a los empates en los campos de Levante (2-2), Eibar (0-0) y Villarreal (1-1). Un pésimo registro lejos de su estadio que solo empeora el colista, el Málaga, con cinco puntos lejos de La Rosaleda. El conjunto andaluz, prácticamente sin opciones de permanencia, será el siguiente rival del Deportivo tras el partido del domingo contra el Atlético.