El margen para el Deportivo cada vez se estrecha más. Con cinco partidos por disputar y quince puntos en juego, el futuro inmediato de los blanquiazules se decidirá esta noche en el partido que enfrentará al Levante con el Málaga. La distancia con la permanencia se establecerá a partir de lo que ocurra en el encuentro de hoy en el Ciutat de Valencia. Todo lo que no sea una victoria granota mantendrá elevadas las esperanzas de un Deportivo que aspira a lograr dos victorias más que su principal rival por la salvación para alcanzar el sueño de la salvación.

Pocos tropiezos podrá permitirse el conjunto de Clarence Seedorf en este tramo final del campeonato para conservar sus aspiraciones de mantenerse en Primera División después del empate del martes ante el Sevilla en Riazor. Fue un resultado "agridulce", en palabras de Rubén, determinante con sus intervenciones para que el equipo mantuviese hasta el tramo final del encuentro las posibilidades de llevarse la victoria ante los andaluces. "La sensación es agridulce porque creo que hicimos un muy buen partido", reconoció el guardameta deportivista. "Los tres puntos eran importantísimos para meter presión al Levante, pero tenemos que valorarlo como bueno por el rival y porque, dentro de lo que cabe, podemos seguir peleando", añadió.

El objetivo de apretar a los granotas se esfumó, pero el Deportivo mantuvo la racha positiva después de las victorias ante Málaga y Athletic. Además reenganchó a la afición para la causa de la salvación después de un curso plagado de decepciones que derivó en un divorcio con la grada.

20

Entrenamiento en Abegondo antes de viajar a Leganés

Esos resultados han supuesto un impulso para un equipo no hace mucho desahuciado y que ahora atisba una posibilidad de conservar la categoría. "Seguimos confiando. Mientras haya posibilidades seguimos confiando al cien por cien. Aunque haya un uno por ciento no lo podemos tirar. Hace una semana nadie apostaría por los resultados que sacamos. Tenemos que aferrarnos a eso y luchar mientras haya esperanza", reflexionó ayer Rubén tras el entrenamiento de la plantilla en la ciudad deportiva.

Las opciones blanquiazules, sin embargo, siguen a expensas de los resultados del Levante, que esta noche tendrá uno de sus compromisos más asequibles con la visita del Málaga a su estadio. Con eso debe convivir el conjunto de Seedorf, que acepta con resignación el desafío que debe superar en el último tramo de la competición. "Es una situación que no buscas a principio de temporada, pero es lo que nos queda, tenemos que hacer nuestro trabajo, seguir ganando partidos y esperar porque lamentablemente la temporada fue así", argumentó ayer Rubén.

Mirando de reojo a lo que ocurra esta noche en Valencia, el Deportivo ya deberá centrarse en el partido de mañana ante el Leganés para mantener esa dinámica positiva que le permita inquietar al Levante en la clasificación.