El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha propuesto a CCOO, UGT y CSI-CSIF que los salarios de los empleados públicos suban el 0,3% en 2010. Según confirman los tres principales sindicatos, el aumento beneficiaría tanto a funcionarios como al personal laboral.

La propuesta les fue entregada durante la tarde de ayer en el palacio de la Moncloa a los secretarios generales de las federaciones de los Servicios Públicos y de la Ciudadanía de UGT y CCOO, Julio Lacuerda y Enrique Fossoul, así como al presidente de la central sindical CSI-CSIF, Domingo Fernández.

El Gobierno -explican los sindicatos convocados por el presidente- no les ha concretado, sin embargo, las subidas para los ejercicios de 2011 y 2012, y la intención del Ejecutivo central es firmar un acuerdo plurianual.

Al respecto, Miguel Borra, miembro de la ejecutiva nacional de CSI-CSIF, dijo que el Gobierno central quiere aplicar una cláusula de revisión salarial para evitar pérdidas de poder adquisitivo en esos dos ejercicios, que entraría en vigor el 1 de enero del próximo 2012. Las cláusulas se activan cuando el IPC real supera al previsto, con lo que se evita que los trabajadores pierdan poder adquisitivo.

Según los tres sindicatos convocados, el Gobierno de Zapatero les ha transmitido que su previsión de IPC para 2010 es de entre el 0,7 y el 0,8%, mientras que en el año 2009 cerrará a la baja.

Las tres organizaciones sindicales tienen previsto estudiar mañana en profundidad lo ofrecido por el Ejecutivo central, al que tienen que dar una respuesta el próximo jueves. El Gobierno tiene que incluir estas alzas en su proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2010, que quiere tener aprobado para antes del 25 de septiembre.

Lacuerda lamentó en nombre de UGT que el Gobierno no haya plasmado por escrito todos los términos retributivos, así como la aplicación de la cláusula.

No obstante, mostró su esperanza en que se den todas las condiciones para que los sindicatos puedan aceptar la propuesta del Ejecutivo, ya que su intención es no ser inamovibles.

Borra valoró el que el Gobierno haya decidido dotar a los trabajadores de la Administración de una cláusula, así como que haya cerrado con los sindicatos los aspectos que contempla el desarrollo del Estatuto del Empleado Público en materia de carreras profesionales, jubilación y modernización de la administración.