Un grupo integrado por unos 50 emprendedores y empresarios de las cuatro provincias gallegas liderado por el presidente de la constructora Isoman, Antonio de la Iglesia, acaba de crear una nueva asociación alternativa a la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) que preside Antonio Fontenla y a cualquier otra institución patronal con el único objetivo de denunciar y llamar la atención sobre los problemas reales del empresariado gallego de los que, según sus promotores, "nadie habla ni denuncia".

"Queremos alzar la voz y opinar de la restricción del crédito y de las decisiones políticas que nos afectan porque vemos que están pasando cosas realmente importantes, como la fusión de las cajas, el nuevo plan general de A Coruña o la paralización del puerto de Vigo y que nadie abre la boca" , explica Jacobo Gantes, uno de los miembros de la Asociación Comercial de Emprendedores de Galicia (Ascega).

Los fundadores de Ascega contestan de este modo al "descontento" de una serie de empresarios con la forma de actuar de las distintas agrupaciones sectoriales que en medio de la mayor crisis económica mundial permanecen "muy calladas".

"No vamos contra nadie, contra ninguna asociación en concreto, sólo respondemos a una sensación y es que cuando leemos los periódicos parece que todo el mundo juega a la política y nadie quiere opinar. Nosotros queremos hacerlo, hablar claro sobre lo que pasa en Galicia porque no rendimos pleitesía a nadie", advierten.

El diputado del PP y Abogado del Estado, Manuel Pizarro -fichaje estrella de Mariano Rajoy para las últimas elecciones generales- apadrinará la nueva agrupación con una conferencia sobre la crisis y las perspectivas de futuro que impartirá el lunes, aunque los fundadores de Ascega definen su organización como "políticamente independiente". "Contamos con Pizarro porque teníamos acceso a él pero esperamos organizar otras conferencias con altos cargos socialistas y empresarios importantes y de otras tendencias", añaden.

Uno de los primeros objetivos de Ascega es de hecho lograr una reunión con el conselleiro de Economía, Javier Guerra, al que no dudan en criticar por su aparente ausencia de la vida pública. "A lo mejor debería dar alguna rueda de prensa de vez en cuando para contarle a los gallegos lo que está pasando con la crisis y cómo se va a abordar", expone Jacobo Gantes.

Los directivos de Ascega entienden que las organizaciones empresariales tuviesen menos protagonismo durante la etapa de crecimiento económico, pero consideran fundamental actuar y de forma decidida ante un panorama como el actual. "Parece que los empresarios sólo estuviesen preocupados por quién va a dirigir sus organizaciones cuando hay autónomos, emprendedores y empresas con problemas que hay que poner sobre la mesa", argumenta Gantes.

Ascega nace en A Coruña y su presidente es coruñés, pero asegura contar entre sus afiliados a diversos empresarios de Vigo, Ourense o Lugo y que alguno de ellos "dará la cara" hoy, durante la presentación oficial de la asociación. "El interés de la gente ha desbordado nuestras expectativas", expone Jacobo Gantes, quien detalla que entre los asociados hay ingenieros, abogados, arquitectos, empresarios de la construcción, como Antonio de la Iglesia o Alberto Paz o comerciantes, como Antonio Amor, de Área Obelisco.

El representante de las Cámaras de Comercio en Europa, Arnaldo Abruzzini, visitó ayer A Coruña para hablar ante los empresarios gallegos sobre las consecuencias que tendrá el Tratado de Lisboa en el día a día de las empresas europeas durante una conferencia en la que Abruzzini analizó también el papel de las instituciones camerales europeas. Al acto, que se celebró ayer por la tarde, acudieron además los principales responsables de las cámaras de comercio gallegas, representantes del Consejo Superior de Cámaras de España y el presidente de la institución de Barcelona, Miquel Valls. / Redacción.