El primer ministro luso, José Sócrates, reiteró ayer que Portugal está en disposición de cumplir con el objetivo de rebajar el déficit público y restó crédito a quienes apuestan por que su país será el próximo en recurrir a la ayuda externa, tras Grecia e Irlanda. Sócrates hizo estas declaraciones después de que la revista alemana Der Spiegel publicara en su versión digital que los gobiernos de Francia y Alemania pretenden que Portugal solicite cuanto antes el rescate de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin mencionar sus fuentes, la revista dijo que a expertos del Gobierno de ambas potencias europeas les preocupa que Lisboa no pueda financiar su deuda a ritmos razonables, después de que su costes de crédito se elevaran a finales del año pasado.

"Tenemos mejores resultados tanto por el lado de los ingresos como por el lado de los gastos, y eso es la señal de confianza más poderosa que podemos dar a los mercados internacionales", insistió Sócrates ayer en Lisboa, tras una reunión con empresarios para fomentar las exportaciones. El primer ministro se refirió así a los datos que esgrimió esta semana en el Parlamento, donde avanzó que Portugal cerró 2010 con un crecimiento cercano al 1,4%, el doble de lo previsto; que cumplió su propósito de rebajar el déficit público en dos puntos en el último año, hasta el 7,3%, y que los ingresos del Estado vía impuestos aumentaron por encima de lo esperado.