NCG Banco sale de cuentas en ocho días pero nadie sabe a ciencia cierta qué día nacerá. La dirección de Novacaixagalicia preveía que la nueva entidad sería registrada el próximo día 1 y empezaría a operar inmediatamente pero habrá que esperar, aunque sólo sea unos días. La caja todavía no tiene la ficha bancaria que le faculta para operar como banco y le faltan las autorizaciones de varias instituciones, entre ellas, la del Banco de España, que por lo que el propio supervisor atribuyó a un "error administrativo", cerró en agosto por vacaciones sin aprobar la segregación del negocio financiero a la entidad de nueva creación.

Novacaixagalicia tiene previsto para el jueves el que debiera ser su último consejo de administración como caja de ahorros, antes de su transformación en banco, pero aunque parece improbable que se convoque una nueva reunión extraordinaria, sí es posible que la comisión delegada vuelva a reunirse antes de la transformación, dado que el siguiente jueves es 1 de septiembre.

Fuentes de Novacaixagalicia explicaron ayer que el supervisor atribuyó su fallo a su falta de experiencia en expedientes como el de la caja gallega y que sus responsables ya se disculparon por lo ocurrido. El Banco de España ha aprobado en los últimos meses distintas segregaciones de activos de grupos de cajas a un Sistema Institucional de Protección (SIP). En estos casos, la creación del banco se aprobaba en los órganos de gobierno de las entidades de origen meses antes de la segregación de activos y el instituto emisor tramitaba cada uno de los dos expedientes por separado. Cuando el supervisor recibió la documentación presentada por Novacaixagalicia -que a finales de julio aprobó en asamblea la creación del banco y la segregación de activos- el supervisor financiero dio luz verde al primer punto; la creación del banco, pero no al segundo. Y luego cerró en agosto por vacaciones.

El comité ejecutivo del Banco de España tiene prevista una reunión para el próximo 2 de septiembre para aprobar -entre otras cuestiones- el traspaso del negocio a NCG Banco, y la ficha bancaria. La Xunta cuenta con haber dado su visto bueno a la nueva entidad a finales de agosto, tras el dictamen de la Dirección Xeral de Política Financeira e Tesouro. La Dirección General del Tesoro -que depende del Tesoro Público nacional- también tiene que autorizar la operación y está previsto que lo haga en los primeros días de septiembre.

En cuanto el banco sea anotado en el registro mercantil y empiece a operar tendrá que convocar un consejo de administración para designar a Castellano presidente. Luego vendrán las ampliaciones de capital con las que se recapitalizará NCG Banco.

Novacaixagalicia no ha convocado oficialmente a la cúpula de la caja para la reunión del consejo del jueves, por lo que todavía no ha comunicado la relación de temas a tratar, tanto en la comisión delegada, como en el consejo que se celebre a continuación.

La entidad tiene pendiente, sin embargo, aprobar la modificación del proyecto de recapitalización de Novacaixagalicia que envió en marzo al Banco de España. El consejo aprobó un plan de recapitalización mixta -con fondos públicos y privados- como vía para llegar a un capital principal del 10% y una reducción de los gastos y participadas para reducir las necesidades de capital. Según explicaron fuentes del consejo, ahora toca retocarlo y adaptarlo al plan de Castellano en el que actualmente trabaja la caja. Esta modificación iba a debatirse en el consejo de administración de finales de julio, pero finalmente se delegó la decisión en la comisión delegada, que volvió a reunirse la primera semana de agosto y tampoco trató el asunto, con lo que podría colarse en el consejo del jueves. El plan de recapitalización ya fue aprobado por el Banco de España, pero tiene que contar con el visto bueno de la Comisión Europea, sobre todo para que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) inyecte fondos en la entidad.

Mientras la caja realiza sus últimos trámites, el futuro presidente de NCG Banco, José María Castellano, continúa sus contactos con inversores extranjeros. Fuentes próximas al directivo aseguran que en las últimas semanas ha viajado a América para negociar con los fondos interesados en aportar capital y que hay lugar para el optimismo a pesar de que la tormenta financiera no favorece la confianza en las entidades españolas o europeas. Castellano espera captar entre 500 y 700 millones de euros. Le quedan semanas para cerrar los flecos de la negociación, en función también de la valoración de la entidad que hagan los inversores y el FROB, lo que decidirá el peso accionarial de cada parte.