Los sindicatos CCOO y UGT prosiguen sus reuniones con los grupos parlamentarios para intentar convencerles de que durante la tramitación del decreto ley de la reforma laboral les apoyen y desaparezca del texto la parte que invade las cuestiones acordadas con la patronal.

Los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, se han reunido con el portavoz de CiU, Antoni Duran i Lleida, dentro de la ronda de encuentros con los grupos parlamentarios para explicarles su posición.

Tras la aprobación de la reforma, Toxo y Méndez ya se han visto con la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y con el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y, después del encuentro de hoy, proseguirán con el resto de los grupos, aunque todavía no están cerradas las citas.

No obstante, ambos son conscientes de la dificultad de cambiar el texto ante la mayoría absoluta del PP y siguen supeditando la convocatoria de una huelga general contra la reforma al respaldo que obtengan el próximo domingo 19 en las manifestaciones que han convocado en toda España.

Ambos quieren convertir las calles de todo el país en un "clamor" contra una reforma que, dicen, consagra el despido libre y ante la que consideran necesario concienciar a la gente.

Para ello, Toxo y Méndez han celebrado esta mañana una asamblea informativa en CCOO-Madrid en la que han pedido a los miles de delegados que han asistido que expliquen en las empresas la "tropelía" en materia de derechos laborales que supone la reforma.

Durante la intervención de Toxo, un delegado ha pedido a gritos la convocatoria de huelga, a lo que el dirigente de CCOO le ha respondido que "todo llegará".

El líder de CCOO ha reconocido que en cualquier otra circunstancia ya estarían convocando la huelga, pero que antes hay que "llenarse de razones" para no ir a un "fallido" (intento) porque la lucha contra esta reforma será sostenida y prolongada, ya que en marzo vendrán los presupuestos del Estado para 2012.

Méndez también ha asegurado que si no se para la reforma, se va a provocar un cambio del actual modelo de convivencia del que sólo se va a salvar una minoría.

Para Méndez no hay ningún ámbito de la población que pueda quedar al margen de los efectos negativos de la reforma, salvo "la minoría privilegiada" que se beneficia de ella, en referencia a los empresarios.

Desde la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) se ha llamado a la movilización en la calle.

El Instituto Cuatrecasas ha coincidido con los sindicatos al expresar dudas legales sobre algunos aspectos de la reforma, algo en lo que también está de acuerdo CiU, razón por la que prepara un informe jurídico a fin de cambiar la redacción del texto.

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha reconocido que en el corto plazo ninguna reforma laboral creará empleo y que sus efectos se verán a medio plazo.

En este sentido ha coincidido con Duran i LLeida, quien también considera que una reforma laboral no creará empleo, pero que sigue siendo necesaria.

Para el responsable de relaciones laborales de la CEOE, José de la Cavada, quitar la autorización de la Administración para la tramitación de los ERE "no es una barra libre para el despido", aunque ha reconocido que las empresas sin representación sindical podrán tenerlo más fácil.

La portavoz del grupo socialista, Soraya Rodríguez, ha dicho que la forma de actuar del Gobierno les hace temer que haya poco margen para modificar una "contrarreforma" laboral que es "mala e inútil" y que el PP tenía pactada con la CEOE desde antes de las elecciones del 20 N.

A su vez, el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha pedido al PSOE que ofrezca alternativas a la reforma y no tantos "eslóganes y pancartas".