La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado hoy que el Gobierno decidirá si pide o no ayuda financiera a la Unión Europea "cuando tenga las cosas atadas y bien atadas".

En una entrevista a Telecinco y preguntada por si finalmente habrá o no una petición de rescate, Sáenz de Santamaría ha hecho hincapié en que, antes "hay que poner los pros y los contras" y tener un "clima de unanimidad" en el seno de la UE. Entonces, ha continuado, el Ejecutivo tomará la mejor decisión para el conjunto de los españoles".

La vicepresidenta se ha referido asimismo a las declaraciones de Joaquín Almunia en las que advirtió a España de que mantener incertidumbres sobre si va a solicitar la ayuda para la compra de deuda es un "riesgo" dada la volatilidad de los mercados.

Ha respondido que, como vicepresidente de la Comisión Europea, Almunia "conoce bien" los procedimientos de la UE -"él sabe muy bien que las cosas tienen sus procedimientos, su marco de actuación y su encaje", ha señalado- y ha destacado que su opinión "no coincide" además con la de otros comisarios europeos.

"No estamos aquí para opinar, estamos para tomar decisiones y tomar decisiones fundadas", ha continuado la vicepresidenta quien ha hecho hincapié en que "opinar es más o menos sencillo pero gobernar supone tomar decisiones y hay que tener todos los elementos encima de la mesa" porque "no sería responsable tomar una decisión 'a bote pronto' sin saber todas las consecuencias que tiene".

Sáenz de Santamaría ha considerado que Europa "tiene que reconocer" las reformas que España está llevando a cabo "con determinación y valentía", así como los sacrificios y la austeridad de sus ciudadanos.

Respecto al líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba -quien ayer aseguró que él no pediría un rescate porque comportaría nuevos sacrificios y afectaría a la "marca España"-, ha dicho que le da "pudor" que no recuerde que "hace poco más de un año" era vicepresidente del Gobierno que dejó el déficit en "cifras desbocadas".

Asimismo, ha recordado que fue ese Gobierno el que, en mayo de 2010, "fue a Bruselas" y, sin recibir de la UE "ningún tipo de ayuda", "ni un sólo euro, recortó los derechos sociales y congeló las pensiones.

"Ahora estamos en otro momento", ha explicado Sáenz de Santamaría quien ha asegurado que el objetivo es conseguir que bajen los intereses de la deuda "haciendo reformas y sin nuevos sacrificios".

Preguntada por si el Gobierno tocará las pensiones, ha respondido que "sería lo último" que haría y ha recordado que, en los Presupuestos de 2012 y junto a los intereses de la deuda, fue la única partida que subió.

Ha señalado además que "la marca España" no se "fortalece hablando", sino "demostrando" que es un país "que trabaja muy bien, muchas horas, que ha hecho una Transición que era muy difícil de manera envidiable, que sabe superar las dificultades políticas y las dificultades económicas".

La vicepresidenta se ha mostrado convencida de que España saldrá "fortalecida" de la crisis y ha argumentado que hay indicadores, como las exportaciones, o el turismo, que "empiezan a funcionar mejor".