El ministro de Economía Luis de Guindos se encuentra ya negociando con la Comisión Europea las condiciones para solicitar el rescate total de España, según informa la edición de hoy del periódico económico 'Financial Times'.

Según el influyente rotativo británico, las nuevas exigencias incluirían más impuestos y ajustes para poder acceder a la ayuda. Añade que estas condiciones podrían darse a conocer la próxima semana.

Precisamente ayer, el presidente del BBVA, Francisco González, ha instó al Gobierno a que pida ayuda "cuanto antes mejor" y "siempre que sea posible" mediante una línea preventiva de crédito o financiación, que ni siquiera se tendrá que utilizar.

Por su parte, la Comisión Europea ha reiterado que no está previsto, de momento, utilizar para otros fines el monto sobrante de la ayuda europea de hasta 100.000 millones de euros que recibirá España para reestructurar y recapitalizar la banca, aunque existe la posibilidad, y de hacerlo no habría más condiciones.

"El dinero puesto a disposición para la reestructuración, recapitalización y reforma del sector financiero de España se ha proporcionado bastante explícitamente para esos objetivos", señaló el portavoz comunitario de Asuntos Económicos y Monetarios, Simon O'Connor, en la rueda de prensa diaria de la Comisión Europea.

"Veremos cuánto de este importe será realmente requerido, realmente usado; tendremos una fotografía más clara en las próximas semanas", cuando el Gobierno español publique el próximo día 28 el resultado de las pruebas de resistencia efectuadas por la consultora Oliver Wyman, que determinarán las necesidades de capital de cada una de las 14 entidades principales de la banca española, dijo.

Guindos señaló el pasado fin de semana en Chipre que la cantidad final se mantendrá "claramente por debajo" de los 100.000 millones de euros y que las necesidades se aproximarán a los 62.000 millones inicialmente estimados.

La cifra de inyección de capital definitiva puede ser inferior porque la banca puede optar por reunir capital acudiendo al sector privado, vendiendo activos, filiales y recurrir al banco malo.

Fuentes comunitarias han apuntado que efectivamente si se empleara el monto restante de la ayuda para la banca para la compra de deuda, eso no implicaría nuevas condiciones para España.