La subida del impuesto sobre el valor añadido (IVA), que entró en vigor el 1 de septiembre, ha provocado una generalizada e intensa subida de los precios en España, según confirmó ayer la estimación adelantada de la inflación correspondiente al mes de septiembre. El IPC escaló en este mes hasta el 3,5%, el nivel más alto desde mayo de 2011. Esta evolución menoscaba el poder adquisitivo de los salarios, que están incrementándose en España a ritmos muy inferiores, y podría disparar también el coste de la compensación a los pensionistas. El Gobierno no ha aclarado aún si aplicará o no esa actualización de las prestaciones, que supondría un boquete de 5.000 millones de euros en la caja de la Seguridad Social.

Según las cuentas del Instituto Nacional de Estadística (INE), la variación interanual del coste de la cesta de la compra ha pasado del 2,7% en agosto -ya un valor alto, motivado por el alto precio de los carburantes- al 3,5% de septiembre, primer mes de aplicación de la subida del IVA (del 8% al 10% en el tipo reducido y del 18% al 21% en el general).

"Ese resultado es consecuencia de la subida generalizada de los precios en la mayoría de las parcelas", señala la comunicación divulgada por el INE. El organismo da a entender de ese modo que, finalmente, también fue generalizado que el comercio y otros sectores implicados como el transporte o la energía repercutieran el incremento fiscal en los precios de venta la público.

El comportamiento de la inflación tiene un primer efecto sobre el poder adquisitivo de asalariados y pensionistas. La subida media pactada en los convenios colectivos en España está por debajo del 1,5%. Aquellas plantillas que carecen de cláusulas de revisión salarial, algo cada vez más frecuente, perderán dos puntos de poder adquisitivo si la inflación mantiene su nivel actual hasta final de año, algo que consideran factible algunos observatorios económicos.

La escalada de la inflación pone también en jaque las cuentas públicas y la reducción del déficit. En principio, los pensionistas deben ser compensados por la desviación entre el IPC real y la subida del 1% de las prestaciones que reciben desde enero. El dato que se toma como referencia es la inflación de noviembre. En el supuesto de que los precios se mantengan en el mismo nivel, el desembolso supondría 5.000 millones de euros: 2.500 correspondientes a la paga compensatoria de 2012, que se cobra en enero, y otros tantos para consolidar la actualización en 2013.

El Gobierno ha evitado confirmar por ahora si se cumplirá o no el mandato del Pacto de Toledo de compensar a los pensionistas con arreglo al IPC. El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha augurado que el Ejecutivo no actualizará las prestaciones y que no lo hará público hasta después de las elecciones gallegas y vascas del próximo 21 de octubre.

Aumento en la eurozona

La tasa de inflación de la zona euro se situó en septiembre en el 2,7%, lo que supone una décima más que en el mes de agosto y su segundo incremento consecutivo, según refleja la estimación adelantada del indicador publicada por Eurostat. La agencia estadística europea publica destaca que los precios de la energía se incrementaron un 9,2% en septiembre y los de la alimentación, el alcohol y el tabaco aumentaron un 2,9%, frente al 3% de agosto.