La empresa creadora de juegos Atari se ha declarado en bancarrota en un esfuerzo por liberarse de su elevada carga de deuda, especialmente debido a su filial francesa, para lo cual Atari Inc. y tres de sus filiales presentaron las respectivas solicitudes de quiebra este domingo en Nueva York.

Los dirigentes de la compañía esperan liberar la parte americana de la empresa de la francesa Atari S.A. y encontrar en los próximos meses un comprador. Según afirmó una fuente anónima a 'Los Angeles Times', esperan crear un negocio modesto enfocado en lo digital y en las plataformas móviles.

La marca tiene 31 años de edad y sigue siendo mundialmente conocida por su papel pionero en videojuegos como Pong, pero aún así ha estado envuelta en problemas financieros durante décadas.

En el 2000 Atari se unió a Infogrames, una compañía francesa, cambiando su nombre por Atari S.A., consiguiendo la totalidad de los activos de la compañía pionera en videojuegos.

El presidente Jim Wilson ha intentado reconstruir la compañía, que sólo cuenta con 40 empleados en los Estados Unidos, centrándola en el desarrollo de juegos para 'smartphones', entre ellos "grandes éxitos" que compila varios títulos de arcade y una versión actualizada del famoso Pong.

El presidente ejecutivo también ha licenciado el logotipo de Atari para merchandising, un negocio que proporciona alrededor del 17% de los ingresos de la compañía.

Sin embargo sus beneficios han sido bajos y los ingresos han caído un 34% en 2012 y un 43% en 2011 y las acciones han bajado desde 11 euros en 2008 a menos de un euro actualmente.

El potencial de crecimiento de la compañía se ha visto obstaculizado por su dependencia casi total de la sociedad financiera BlueBay Asset, a la cual debe un crédito de 28 millones de dólares (21 millones de euros) que ha dejado a Atari sin los recursos necesarios para lanzar juegos que se encontraban en desarrollo, incluyendo el título de juegos de azar "Casino Atari".

Los esfuerzos de capitalización de la empresa no han tenido éxito, en parte debido a su compleja estructura de empresa americana con un listado público de valores francés.

Por ahora no está claro quien podría interesarse por la compra de Atari Inc. aunque Jim Wilson, probablemente, buscará apoyos para mantener el control de la empresa. También es posible que la compañía sea vendida por partes a otros compradores interesados.