El parón del sector eólico en Galicia y España y la inseguridad jurídica del país se han cobrado una nueva víctima. La corporación francesa Alstom, con 4.000 empleados en todo el mundo, anunció ayer a sus trabajadores el cierre de sus dos centros de producción en Galicia, que dan empleo a 63 personas y que serán despedidas o trasladadas a otras plantas, según explicaron fuentes de la empresa.

Alstom elabora equipamientos eléctricos y componentes de sus turbinas eólicas en sus dos plantas gallegas -que la empresa trata como un solo centro, con dos talleres en As Somozas y Río do Pozo, en Narón-, pero la caída de la carga de trabajo y la "ausencia de un marco regulatorio estable" han animado a la firma francesa a desistir y trasladar la producción de Galicia a la factoría que regenta en Buñuel (Navarra), donde ya se ensamblaban las piezas producidas en la comunidad gallega.

A las dos plantas coruñesas se une la factoría de Altamira (Zamora) que también echará el cierre y un recorte de 373 empleos en España que suponen el 36% de los 1.040 puestos de trabajo que sustentan el negocio eólico de la compañía en España, dirigida por Antonio Oporto del Olmo.

Alstom presentó ayer su plan de ajuste a los miembros del foro europeo de trabajadores de la propia compañía y alude a la "crisis económica" y a la "ausencia de un marco regulatorio estable" como aspectos que han frenado la demanda interna y que recomiendan las medidas de producción. La firma sostiene que el recorte de empleo será negociado con los trabajadores, por lo que de momento no está decidido qué hará con los 63 trabajadores gallegos a los que Alstom intentará "recolocar" en otras instalaciones. La firma no ha presentado ningún Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y buscará determinar la situación y necesidades de la empresa. De presentarse, la medida no llegaría antes del próximo mes y medio.

El borrador del plan de ajuste prevé además adaptar las oficinas centrales a la "nueva realidad operativa", y a las dificultades que vive el sector en el país. La división de operación y mantenimiento centrará su negocio en aportar servicios de valor añadido. Alstom explicó ayer que a los problemas que sufre el sector eólico en España se une a la "limitada" capacidad de exportación a otros mercados por los requerimientos de producción local o por la "fuerte presión de los precios" como consecuencia de la sobrecapacidad mundial.

La planta de As Somozas comenzó a funcionar en 1997 bajo la dirección del fabricante catalán de aerogeneradores Ecotecnia. Alstom adquirió en 2007 la firma por 350 millones y se lanzó a un plan de expansión mundial que tropezó con la crisis. Alstom se une a los cierres y recortes de empleo protagonizados en los últimos años por firmas vinculadas al sector eólico, la mayoría en la provincia coruñesa, como Gamesa, Vestas, LM Composites, Emesa, Barlovento, Metalúrgica del Atlántico y LM Glasfiber, entre otras.