Blusens Technology SLU, la filial de compras del grupo de electrónica de consumo fundado en Santiago de Compostela, ha presentado este lunes en el Juzgado de lo Mercantil de A Coruña concurso voluntario de acreedores con la pretensión de "reestructurar su deuda y buscar nuevas alternativas de financiación".

Según han informado a Europa Press fuentes de la compañía, la deuda bancaria de Blusens Technology SLU se eleva a 18,5 millones de euros, después de amortizar líneas de financiación por más de 20 millones de euros en los últimos tres años. El pasivo de la sociedad en la actualidad son 39,5 millones de euros frente a un activo de 33 millones.

Blusens Technology SLU mantiene la deuda bancaria sobre todo con las entidades Bankia (en torno a 6,2 millones de euros); Grupo Popular (sobre 3,9 millones); NCG (por un montante de 3,7 millones); Santander (por 3,2 millones después de aplicar garantías monetarias proporcionadas por 2,5 millones); y BBVA (por 841.000 euros).

La compañía sostiene que el concurso voluntario de acreedores no afecta ni a la cabecera del grupo, Blusens Global Corporation --también con sede en Santiago--, ni a las demás filiales de México, Colombia, Chile, Suramérica, Oriente Medio y China.

La empresa presidida por José Ramón García González ya había anunciado el pasado mes de julio la presentación del preconcurso de acreedores para su filial de compras, que había justificado por "la falta de financiación en España" y para poder así proseguir su expansión internacional.

Previamente, el pasado 12 de junio se había hecho pública la salida de Inveravante del accionariado de Blusens, donde controlaba el 47,5% del capital desde abril de 2008, pero la dirección del grupo tecnológico desvinculó este movimiento del preconcurso de acreedores.

Sin nuevos despidos

La central de compras ha prescindido de 58 trabajadores en los últimos tres años, al pasar de los 120 empleados con los que contaba en 2011 hasta los 62 actuales, con la finalidad de adaptar la estructura de costes a su capacidad financiera.

Fuentes de la empresa consultadas por Europa Press han descartado que se realicen nuevas medidas de ajuste en su plantilla y han asegurado que la continuidad de los actuales trabajadores forma parte del plan de viabilidad que elabora la dirección de la compañía.

Plan de viabilidad

La empresa se ha mostrado confiada en que en el primer trimestre de 2014 volverá a estar en cifras positivas. "La estructura de costes no sufrirá un incremento proporcional al que experimentará el importe neto de la cifra de negocios, permitiendo que se generen nuevamente un Ebitda (el beneficio bruto de explotación) y flujos de caja positivos", afirma en un comunicado en el que sostiene que Blusens ya ha realizado la mayor parte de las inversiones necesarias para desarrollar su actividad en I+D, marca, expansión internacional y creación de fondo de comercio.

Los datos de facturación de Blusens Technology reflejan 31 millones de euros en 2012, frente a los 56 millones de 2011, después de tener que renunciar a pedidos por 50 millones de euros en dicho año por falta de financiación.

La compañía señala que el plan de negocio que presentará a sus acreedores para renegociar su deuda y conseguir nuevas alternativas de financiación incluirá el lanzamiento del lineal de teléfonos móviles smartphones, como apuesta de la compañía para esta campaña navideña 2013 y que presentará en las próximas semanas.

Según la compañía, en el pre-test realizado hasta la fecha, se ha conseguido "una altísima valoración por parte de los clientes y usuarios finales", por lo que se muestra confiada en "un futuro prometedor para esta nueva gama de productos".

Asimismo, expone que en el presente ejercicio continúa su actividad en el mercado español en el negocio de las tablets, donde ha ocupado la tercera posición en ventas, por detrás de Samsung y Apple en el primer trimestre.

Los televisores de mediana pulgada, la oferta de dispositivos smart tv, con el Blusens Web TV a la cabeza, y los MP3/MP4, son otras de sus principales líneas de producto, que la empresa sostiene que han adaptado su volumen de negocio a las actuales disponibilidades financieras.