Los trabajadores de Alcoa se han mostrado este miércoles "muy preocupados" por la viabilidad de la multinacional tras la subasta para fijar el precio del conocido como servicio de interrumpibilidad, por el que los grandes consumidores de electricidad reciben un incentivo por detener la actividad en los momentos en los que lo requiera el sistema eléctrico.

El presidente del comité de empresa de Alcoa ubicada en San Cibrao (Lugo), Luís Combarro, de UGT, ha trasladado la preocupación extendida entre la plantilla, de más de mil trabajadores, tras el resultado "de la subasta que ha emprendido el Gobierno para fijar el proceso de interrumpibilidad que no ha dado buenos resultados".

"Para mí con esta subasta lo que se ha demostrado realmente es quienes son las empresas que necesitan tener un precio en el mercado energético que te haga ser competitivo y nos pone en una incertidumbre porque los centros de Alcoa en Avilés y A Coruña se han quedado sin ningún paquete y la de San Cibrao de los cuatro que necesitaba para poder ser más competitiva y garantizar la continuidad de la fábrica y el mantenimiento de los puestos de trabajo, solo tuvo tres de las cuatro", ha señalado.

Combarro ha precisado que, tras la reunión que mantuvieron con la dirección de la empresa en A Mariña luguesa, ésta les anunció que "la dirección a nivel mundial se va a reunir para hacer un análisis y tomar medidas". "Nos preocupa la situación de futuro que podamos tener", ha apostillado.

El presidente del comité de empresa ha puntualizado, sobre la subasta, que "en todas aquellas empresas que son grandes consumidoras de energía se ajusta a la norma que hay para la interrumpibilidad, que quiere decir que, en un momento dado, la red eléctrica española tiene un pico muy alto de energía y lo que se hace a aquellas empresas acogidas a este sistema te cortan por dos o tres horas lo que es tú energía".

"Y esa energía que tú no consumes se pone a disposición de la red eléctrica española y al ponerla a disposición de la red eléctrica supone pagar un dinero por ese consumo que no haces", ha añadido.

Combarro ha detallado que "ahora el cuarenta por ciento del coste de nuestra producción es energética". "Es mucho dinero y nosotros, los comités de empresa de las tres plantas y los trabajadores estamos muy preocupados porque si no hay un precio competitivo difícilmente podremos ver que tengamos un horizonte lejano sino todo lo contrario", ha concluido.