La planta coruñesa de Alcoa solo colocó en lo que va de año la mitad de su producción. El resto, más de 5.000 toneladas, se acumula en las instalaciones de A Grela y en el puerto de A Coruña. Fuentes del comité de empresa explicaron ayer a este diario que la fábrica está al 74% de su capacidad -frente al 63% del año pasado- tras poner en marcha 25 cubas más, con lo que produce unas 5.600 toneladas de producto al mes. Las escasas ventas en estos dos primeros meses del año provocaron que la mitad de la mercancía -esas más de 5.000 toneladas- siga a la espera de encontrar destino.
Fuentes de la multinacional estadounidense achacan el stock actual al "bloqueo" y la menor actividad de la fábrica en las últimas semanas de 2014, durante la amenaza de cierre por los altos costes energéticos derivados del resultado de la subasta de la interrumpibilidad -los incentivos que reciben las grandes consumidoras de energía a cambio de reducir o suspender el consumo en caso de que el sistema no logre atender la demanda de electricidad- y las protestas de la plantilla. "El bloqueo hizo que se acumulara producto en la planta y hubo que surtir a los clientes con mercancía de otras fábricas", apuntaron los representantes de Alcoa en referencia al aluminio llegado de la factoría de Maaden (Arabia Saudí). "Hay que cumplir los compromisos con los clientes como sea", sentenciaron fuentes de la aluminera.
El comité de empresa desmiente la versión de la compañía y niega que el stock se generase en los últimos días de 2014 sino en estos dos primeros meses del año "por la escasa actividad comercial" de la firma. "Los clientes de Alcoa apenas solicitan producto en diciembre porque saben que a partir del día 20 sus fábricas suelen parar, con lo que en esas semanas no aumentó el stock. Todo se debe a la escasa actividad comercial en lo que va de año", remarcaron fuentes de la plantilla, que entienden que la firma está perjudicando a la planta de A Coruña con su política comercial.
Los trabajadores denuncian además que la producción de la fábrica de A Grela se centra en las últimas semanas en la elaboración de lingotes T -"de escaso valor añadido, un producto muy básico con el mismo precio que el aluminio y que suele necesitar una segunda fundición"- en vez de tocho, el producto tradicional de las instalaciones coruñesas, que genera mayores ingresos. Una estrategia, consideran los representantes sindicales, encaminada a que la fábrica registre pérdidas y poder justificar así un posible cierre en el futuro.
La multinacional aluminera defiende, sin embargo, que cada factoría "elabora un determinado producto en función de los pedidos [que tiene]" y que depende únicamente de la actividad comercial.
Las escasas ventas en lo que va de año, según reconoció el miércoles la dirección de Alcoa en A Coruña al comité de empresa, generaron unas pérdidas de 1,4 millones de euros pero la compañía confía en normalizar la situación en marzo, dando salida a las 5.000 toneladas de mercancía que tiene almacenadas.
El sindicato UGT también denunció ayer que Alcoa España realizó inversiones en los últimos años en las instalaciones que tiene en Islandia y Arabia Saudí, unas fábricas que, aseveró, podrían acabar acaparando el mercado de la fábrica coruñesa. "En el caso de la fábrica saudí de Maaden nos garantizaron que en el primer trimestre de este año no va a llegar producto de allí, pero no aclaran lo que pasará pasados esos tres meses", critican los responsables de UGT. La central sindical lamenta además que Alcoa no despeje la incertidumbre sobre la continuidad de la fábrica coruñesa: "Cuando hablamos de futuro dicen que no prevén más allá de noviembre, en referencia al actual sistema de subastas de la interrumpibilidad".
La planta de A Grela obtuvo el año pasado unos beneficios netos de 500.000 euros mientras que el conjunto del grupo estadounidense ganó 1.100 millones de dólares (unos 980 millones de euros). Unos resultados que, según la dirección de A Coruña trasladó al comité de empresa, son "los mejores desde el año 2008 a nivel mundial".
