La empresa pública Xestur se encuentra en una complicada situación financiera. Tiene deudas por importe de 239 millones de euros hasta el año 2021 y la Administración autonómica ha tenido que inyectar en dos años 63 millones de euros para hacer frente a los vencimientos. Sin embargo, el actual Gobierno gallego no se hace responsable de esta situación y culpa de ello al Ejecutivo formado por el PSOE y el BNG que lideró Emilio Pérez Touriño. "La deuda de la empresa Xestur fue generada por la mala gestión realizada en la etapa del bipartito", acusa directamente la Xunta de Feijóo, que precisa que en el año 2005, justo ante del cambio en San Caetano, las cuatro Xestur provinciales -antes eran independientes, pero ahora se han fusionado en una única entidad- "eran empresas saneadas y solventes y con una deuda financiera de solo 30 millones".

Sin embargo, explica la Consellería de Medio Ambiente, cuando en 2009 se produjo el cambio de Gobierno y el PP volvió a ocupar San Caetano tras el bipartito, la deuda financiera de Xestur ya ascendía a 180 millones de euros.

Este desfase se produjo, según el departamento que dirige Ethel Vázquez, porque Xestur actuó como instrumento de financiación de las iniciativas del Instituto Galego da Vivenda e Solo -dedicado también a la compra de suelo y a la promoción de viviendas y parques industriales-, que le trasvasó iniciativas propias por valor de 51 millones, como el parque ofimático de A Coruña, Valdecorvos (Pontevedra), la Plisan de Salvaterra-As Neves, O Bertón (Ferrol) y As Gándaras y Garabolos (Lugo). También se le encargó a Xestur comprar y urbanizar suelo en la provincia de Ourense. En total, las actuaciones encomendadas ascendieron a 215 millones. La Xunta asegura que además Xestur, ya por su cuenta, comprometió otras 21 actuaciones por importe de 685 millones.

Compromisos "desproporcionados"

"En 2009, en el momento del cambio de Gobierno los compromisos de Xestur superaban los 900 millones en suelo empresarial y viviendas, cuando las ventas medias anuales entre 2005 y 2008 ascendían a 25 millones, lo que da idea de la desproporción entre las compras y las inversiones con respecto a las ventas", sostiene Medio Ambiente para justificar la actual situación financiera de Xestur.