El consejo de administración de Pescanova tiene ya toda la documentación que precisa para convocar la junta extraordinaria de accionistas que, tal y como manda el convenio de las filiales, deberá celebrarse antes del 30 de septiembre. Ernst & Young ha culminado ya la elaboración de los balances de fusión y segregación de las diez subsidiarias que se integrarán dentro de Pescanova España SLU, que a continuación será absorbida por el holding Nueva Pescanova en cuanto finalice el proceso de reestructuración de la pesquera. Según fuentes próximas a la compañía, los administradores solo precisaban disponer de estos balances de fusión para comunicar a los accionistas y a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) cuándo será la asamblea. Según los balances elaborados por la auditora, las filiales arrancarán su nueva etapa con ganancias de 27,256 millones de euros una vez superada la etapa concursal, con quitas de entre el 0 y el 96% (una media del 73,33%).
Ante el riesgo de quiebra que amenazaba a las subsidiarias españolas -sobre todo a Bajamar Séptima (Arteixo) y Frinova (Porriño)-, Pescanova decidió provisionar o apartar unos 118 millones. "Tras la aprobación de los concursos de las filiales españoles, las provisiones constituidas con este motivo han sido liberadas", relata el balance de fusión de Pescanova SA, firmado por los cuatro consejeros de la compañía: Fernando Herce, Alejandro Legarda, Diego Fontán y César Mata. Sobre esos 118 millones, eso sí, apuntó un deterioro de 57 millones por el efecto de la fusión. Además, y ante la posibilidad de tener que hacer frente a sanciones de la CNMV -posee cinco expedientes del regulador- o a una sentencia del caso que instruye la Audiencia Nacional, la compañía ha provisionado otros 12 millones "para riesgos y gastos".
EBajamar Séptima. Era la segunda subsidiaria con riesgo real de liquidación, con una deuda concursal de 460 millones y una quita del 95,9%. Perdió 30,3 millones en 2014, pero lo ha revertido tras el concurso con un resultado de 55,8 millones. El 22 de julio vendió terrenos e instalaciones en El Puerto de Santa María por 1,6 millones.
EFrinova. La compañía instalada en Porriño afrontaba una propuesta de quita del 96% sobre un pasivo concursal de 356,25 millones. En realidad la deuda de esta filial era de solo 20,52 millones, pero se disparó cuando la matriz y Pescafina superaron sus concursos porque avalaba no solo préstamos de ambas, sino también de filiales internacionales. Tiene patrimonio positivo de 13,399 millones (a 30 de junio) y un resultado positivo de 9,112 millones. Cerró 2014 con un volumen de ventas de 31,9 millones, con lo que encadena tres años a la baja. Su representante es Santiago Gómara Millán.
EPescanova Alimentación. La filial de comercialización de productos del mar congelados y refrigerados cerró 2014 con pérdidas de 3,76 millones. Arrastra un patrimonio negativo de más de 53 millones y números rojos de 36,7. Con un pasivo de 36,269 millones, su deuda se disparó hasta los 662,175 millones tras las quitas realizadas a Pescanova SA y Pescafina. Firma sus cuentas Antonio Manuel Janeiro Ramos.
EFrigodis. Aunque su deuda real era de 3,896 millones, el efecto de la quita en la matriz y Pescafina hizo que los acreedores le reclamaran 94,5 millones de euros. Es una sociedad de pequeño tamaño de servicios frigoríficos, y cerró 2014 con pérdidas de 2,2 millones. El resultado hasta junio es de 2,492 millones tras la asunción de pérdidas de ejercicios anteriores. Su deuda financiera es de algo más de tres millones de euros.
EFrivipesca. Es la filial de mayor valor, estimado en unos 121 millones. Arrastra fondos propios negativos por 21,19 millones y afrontó un concurso con un pasivo de 272 millones (aunque su deuda propia era de apenas 31 millones). El resultado del periodo actual también es negativo, en este caso de 12,9 millones de euros. La buena noticia es el incremento de su actividad, y a 30 de junio tenía compromisos de compra de materias primas por 16,28 millones de euros, frente a los 10 a 30 de noviembre de 2014. El pasado ejercicio lo culminó con números rojos de 12,9 millones.
EPescafresca. Es la tercera filial con patrimonio neto negativo a 30 de junio. Cerró 2014 con pérdidas de 6,9 millones (frente a los -28,1 de 2013), y el resultado tras superar el concurso es positivo en más de 24. Con un pasivo propio de 36 millones, su deuda concursal se disparó hasta los 97,24. Su deuda financiera actual es de 10,49 millones.
EPescafina Bacalao. Sin apenas reducir su volumen de ventas en 2014 (23,2 millones), cerró el año con pérdidas de 65.721 euros. Tiene patrimonio neto positivo, si bien el resultado del ejercicio hasta junio fue de -3,9 millones. Está ubicada en Valencia.
EFricatamar. Es la segunda filial instalada en la Comunidad Valenciana y logró reducir sus pérdidas de más de nueve millones (2013) a 1,048 a cierre de 2014. Con patrimonio neto de 8,3 millones, obtuvo un resultado positivo a 30 de junio de 6,977 millones. Arrastra deudas con la banca de 11,5 millones.
EPescafina. Es el brazo comercializador de la multinacional, la trader. Salió de concurso al mismo tiempo que la matriz y cerró 2014 con beneficios de 124,5 millones tras la aplicación de la quita. Con un patrimonio neto de 22,6 millones, el resultado a cierre de junio fue positivo en 1,61 millones.
La empresa también ha difundido las cuentas de Nueva Pescanova y Pescanova España, sin empleados y que tienen un capital social de 3.000 euros cada una.
