La multinacional estadounidense Alcoa estima que el resultado de la subasta eléctrica organizada por el Gobierno a través de Red Eléctrica la semana pasada, que fija el precio de la factura energética a la industria para 2016, es malo, ya que ofrece "peores" condiciones que la del año pasado, cuando la continuidad de algunas de sus plantas, como la de la A Coruña, estuvo en el candelero.

"Esto nos sitúa en una situación peor", admite la empresa aluminera, que analizará en los próximos "si tendrá efectos" en sus factorías españolas y "cuáles serán". Y lo comunicará a la plantilla "lo antes posible".

Alcoa había advertido antes de la subasta que el hundimiento del precio del aluminio en el mercado mundial por la avalancha de exportaciones a bajo coste procedentes de China les obligaba a rebajar el coste energético de su producción para garantizar la continuidad de sus tres fábricas españolas, dos de las cuales están ubicadas en Galicia, en A Coruña y Lugo.

La repercusión de la factura de la luz en el precio final de una tonelada de aluminio en España es del 43%, según Alcoa.

Esta advertencia, sumada a las numerosas críticas planteadas desde las grandes industrias con gran consumo eléctrico por la inestabilidad del sistema de subasta, que cambia el precio del recibo de la luz cada año e imposibilita un horizonte de planificación e inversión, hizo que varios medios de comunicación económica publicaran en los días previos a la puja que el Gobierno había decidido elevar de 9 a 13 el número de bloques de 90 megavatios, los que proporcionan mayores incentivos de ahorro energético a las industrias, para que no se repitieran los problemas del año pasado. Sorpresivamente, en la subasta no sólo no se aumentaron, sino que se redujeron de 9 a 8.

Alcoa mostró entonces en un comunicado su "preocupación" y "extrañeza" por esta decisión, que podía abocar al cierre o al recorte de empleo a factorías, entre ellas la de A Coruña.

Alcoa ha obtenido finalmente en la subasta de Red Eléctrica sólo tres bloques de 90 megavatios, los que proporcionan mayores incentivos en ahorro energético, en lugar de los cuatro que precisaba. Esos tres bloques se destinarán a la planta de la multinacional en San Cibrán (Lugo), con lo que las factorías de A Coruña y Avilés se quedan sin ninguno. Esto es especialmente preocupante para estas dos plantas, ya que funcionan con una tecnología que fabrica aluminio de gran calidad pero con un gran coste energético.

"El precio del aluminio se ha desplomado en el mercado mundial en los últimos meses por las exportaciones chinas, así que esperábamos compensarlo obteniendo menores costes energéticos en la subasta de Red Eléctrica", señala Alcoa. Pero no fue así. "En lugar de reducir costes, los hemos aumentado". La planta de A Grela, de la que dependen medio millar de familias, obtuvo en la puja 120 megavatios a través de 24 bloques de 5 megavatios, de menor ahorro en el coste energético que los de 90. A pesar de que mantiene la misma potencia que el año pasado, ha perdido incentivos por valor de cerca de dos millones de euros.

El comité de la factoría de A Coruña reconocía ayer que la perspectiva "no es buena".

"La situación del mercado mundial del aluminio es mala y el resultado de la subasta eléctrica no ayuda, es una mala noticia", afirma el presidente del comité, Juan Carlos López Corbacho.

La plantilla coruñesa de Alcoa achaca la principal responsabilidad de esta situación al Gobierno, por no crear un sistema estable y transparente de subasta eléctrica para la industria, pero critica también que la multinacional fuera a la puja "con una estrategia de grupo que lastra el interés de la planta de A Coruña". "No se ha logrado un necesario bloque de 90 megavatios para la planta coruñesa y queremos saber por qué", señala López Corbacho. "La empresa debe pronunciarse ahora cuanto antes y despejar la incógnita del futuro de su planta en A Coruña", demanda el representante sindical.

La plantilla recrimina a la multinacional "la incertidumbre que está generando al conjunto de la plantilla" y le reclaman "el mantenimiento de la actividad y el empleo". "La empresa tiene que presentar un plan industrial de futuro con las inversiones necesarias para garantizar la continuidad de la fábrica", reclaman.

EL JUEVES, CONCENTRACIÓN

El comité de empresa de la factoría de Alcoa en A Coruña ha convocado para este jueves, día 10 de septiembre, un acto simbólico de protesta que consistirá en una concentración delante de la portería de la planta coruñesa entre las 14.30h y las 15h. Los representantes de los trabajadores llaman a todo el personal de la fábrica a participar en esta iniciativa, que incluirá un 'minuto de ruido' para denunciar la "falta de consideración por parte de Alcoa de cara a los trabajadores y trabajadoras de esta fábrica por no confirmar el mantenimiento de la actividad de la empresa y de sus puestos de trabajo y por hacer una competencia desleal contra el centro de A Coruña", según un comunicado firmado por el comité.