La multinacional aluminera Alcoa defendió ayer su actuación en la subasta de los incentivos eléctricos celebrada la semana pasada y, sin negar directamente que en el proceso pudiese haber irregularidades, apuntó que la asignación de los bloques del servicio de interrumpibilidad a cada una de sus fábricas de cara a 2016asignación bloques fábricas se realizó "con la supervisión de Red Eléctrica de España (REE)" y que la puja "fue validada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC)". Con ello la compañía da a entender que la posible impugnación de la subasta anunciada por el comité de empresa de su planta de A Coruña posible impugnación de la subasta anunciada por el comité de empresaA Coruñatendría poco recorrido.

Los trabajadores coruñeses, sin embargo, creen que los tres bloques de 90 megavatios (MW) -los mejor remunerados- que logró la aluminera mediante el proceso de asignación directa no pueden ser íntegramente para la planta de San Cibrao (Lugo) -como decidió la empresaSan Cibrao -, sino que cada planta -la lucense, la de A Coruña y la de Avilés (Asturias)- debería recibir uno de esos grandes lotes. La plantilla coruñesa considera que la norma que regula la subasta obligaba a otorgar un paquete a cada uno de los puntos de suministro que optaban a ellos, por lo que puso el caso en manos de un abogado para ver si el proceso es impugnable. "Si la planta coruñesa logra un bloque de 90 MW supondría mejorar mucho su situación respecto a este año y no vamos a permitir que se beneficie a otras fábricas en perjuicio de la nuestra", sentenció el presidente del comité de empresa de la factoría de A Grela, Juan Carlos López Corbacho. "Y lo que diga la empresa nos importa poco porque está claro que en ningún momento actuó de buena fe, como asegura", añadió.

La empresa no quiso entrar más a fondo en el asunto e insistió en que Alcoa "siguió en todo momento las instrucciones de Red Eléctrica de España".

Sobre el futuro de las tres plantas españolas, que en la subasta lograron retribuciones más bajas para 2016 que las que perciben este año, la compañía remarcó que aún no hay ninguna decisión tomada y que continúa el análisis de la situación para definir las actuaciones futuras. Una tardanza que exaspera a los trabajadores coruñeses. "Está claro que la empresa se mueve por dinero y que nuestras inquietudes y preocupaciones le importan poco", criticó López Corbacho.

Precisamente, en protesta por la "falta de consideración" de la firma y el diseño del Gobierno de un sistema "perverso", los profesionales de la factoría de A Grela retoman hoy las movilizaciones con una concentración a la entrada del centro de trabajo. El acto se desarrollará entre las 14.30 y las 15.00 horas y en él la plantilla guardará "un minuto de ruido" en defensa de la planta coruñesa y de los 400 empleos que dependen directamente de ella.

En esa protesta participará la portavoz de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Yolanda Díaz, una formación que también preguntará hoy a la Xunta en el Parlamento qué gestiones realizó en el último año para garantizar la continuidad de la fábrica coruñesa y reclamará que se cambie el marco energético actual, eliminando las subastas anuales del servicio de interrumpibilidad, tal como pide la plantilla de Alcoa.

Tarifa eléctrica gallega

Mientras, la unión comarcal del sindicato CIG en A Coruña registró ayer varias mociones en distintos ayuntamientos coruñeses y de la comarca de Bergantiños para solicitar el apoyo de las corporaciones municipales a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) de medidas para garantizar "la energía como servicio público y contra la pobreza energética" que promueve el sindicato nacionalista.

La central sindical pretende que se abra el debate sobre "la necesidad y el derecho" a contar con una tarifa eléctrica gallega "que permita diseñar una estrategia energética propia para el desarrollo económico e industrial de Galicia y garantizar el derecho universal de toda la población al consumo de energía".

La CIG considera vital tener una tarifa gallega para garantizar la continuidad de las industrias grandes consumidoras de energía en la comunidad gallega.