EVO Banco acaba de plantear de manera formal el cierre de hasta un 37% de su red de oficinas antes de que acabe este año. El objetivo de la entidad pasa por reducir su actual red de 71 sucursales hasta una horquilla final de entre 45 y 55 oficinas.

La dirección de la entidad, liderada por el lucense Enrique Tellado y perteneciente al fondo estadounidense Apollo, comunicó ayer este nuevo ajuste a los sindicatos. La reducción de la red implicará necesariamente un ajuste de plantilla, aunque la cifra de despidos aún está por definir porque el banco no ha concretado todavía qué oficinas echarán el cierre.

EVO Banco tiene unos 600 trabajadores, más otros 300 empleados de sus filiales Fracciona y Avant Tarjeta. La entidad busca con esta medida ganar rentabilidad ante el embate del entorno financiero.

Para que el nuevo proceso de ajuste finalice antes del nuevo año, se prevé que la mesa negociadora con los sindicatos se constituya este mes de octubre. A partir de ahí, las partes tendrán un mes para negociar, tal y como marca la ley.