El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno se declaró competente para investigar la manipulación de los motores diésel de Volkswagen para alterar el registro de emisiones, y, en un auto, imputó al grupo automovilístico alemán como persona jurídica y lo citó a declarar el día 10.
El escándalo llevó a Volkswagen, el primer productor automovilístico de Europa, a perder en el tercer trimestre del año 1.673 millones de euros, frente al beneficio de 2.971 millones en el mismo periodo de 2014. Son sus primeras pérdidas trimestrales de este fabricante en 15 años. El ministro español de Industria, José Manuel Soria, juzgó "normal" el "impacto" del caso en las cuentas del grupo. Pese a ello, las acciones de Volkswagen se revalorizaron ayer el 3,99% en la Bolsa de Fráncfort y cerraron a un precio de 109,35 euros.
Frente a las pérdidas del grupo, su filial española, Seat, tuvo un beneficio operativo en los tres primeros trimestres de 12 millones de euros, cuando en el mismo periodo de 2014 había perdido 82 millones.La compañía matriz informó de que esta mejora se produjo por los efectos positivos del tipo de cambio del euro, el aumento de ventas y la optimización de costes.
La secretaria general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, Begoña Cristeto, presidirá hoy la reunión del grupo creado para el seguimiento del caso Volkswagen y de las inversiones de la compañía en sus factorías en España. Este equipo está formado por representantes de los ministerios de Industria y de Empleo, sindicatos y las comunidades autónomas con plantas del consorcio Volkswagen (Cataluña y Navarra).
La UE decidió ayer que hasta fines de 2019 los vehículos con motor diésel sometidos a los nuevos test en carretera podrán más que doblar (110% de holgura) el límite de 80 miligramos de emisiones contaminantes tolerado ahora en las pruebas de laboratorio. La flexibilidad se limitará al 50% a partir de esa fecha. Esta decisión se produce tras el fraude los coches de gasoil trucados para que en las pruebas de revisión arrojasen dosis contaminantes inferiores a las reales. El director de Volkswagen, Herbert Diess, y su representante en Japón, Sven Stein, pidieron perdón ayer en el Salón del Automóvil de Tokio y aseguraron que harán "todo lo posible para recuperar la confianza" de los consumidores".
