La Comisión Europea lo tiene claro. Si España continúa con el actual ritmo de implantación de las energías renovables, no alcanzará el 20% de generación con fuentes limpias hasta 2023, tres años después de lo que la Unión Europea se exige para cumplir la estrategia Europa 2020 (reducción de un 20% de las emisiones de gases de efecto invernadero, reducción del consumo de energía en el mismo porcentaje y que un 20% de la electricidad que se consume se genere con fuentes renovables).

Un informe sobre el Estado de la Unión de la Energía que ayer avanzó El País corrige los datos aportados por España sobre la generación con energías limpias, que cifraba el consumo abastecido con esas fuentes en un 17,1% en 2014.

Bruselas sostiene sin embargo que la cifra es 1,3 puntos porcentuales inferior, de un 15,8% y como ya hizo en otras ocasiones advierte de que el país debe revisar sus políticas para garantizar que alcanzará el objetivo, sobre todo porque el desarrollo de las energías limpias es muy escaso desde 2010.

España debería incrementar la generación renovable en algo más de cuatro puntos para alcanzar el objetivo, cuando en los últimos cuatro años avanzó dos. De seguir así, el 20% del consumo eléctrico no se cubriría con renovables hasta 2023.

Precisamente un informe del Instituto de Estudios Económicos (IEE) cifraba el jueves la aportación de las renovables al consumo final de energía en 2013 en un 15%. Mientras, cuatro países de la Unión Europea ya alcanzaron los objetivos marcados en la estrategia Europa 2020 (Suecia, Estonia, Lituania y Bulgaria, mientras que Rumanía e Italia están a tan sólo unas décimas del porcentaje requerido.