El precio máximo de la bombona de butano será de 12,46 euros, impuestos incluidos, a partir de mañana, lo que supone una caída del 5% con respecto a los 13,1 euros fijados en la anterior revisión bimestral, según informaron a Europa Press fuentes del sector. El cambio afecta a las bombonas de butano naranjas -las que comercializa Repsol y que pesan más de nueve kilos en vacío- pues las plateadas -vendidas por Cepsa y que pesan menos de nueve kilos sin gas- quedan fuera de la regulación del Gobierno.

De esta manera, la botella de butano recupera la tendencia bajista en su precio, que se rompió enero con la primera subida desde mayo de 2013. Este descenso del 5% es el límite (al alza o a la baja) establecido en la variación del precio de la bombona, aunque la caída, motivada por la bajada en los precios de las materias primas, debería haber sido mayor. Por ello, se genera un superávit que podría repercutirse en próximas revisiones, según las mismas fuentes.