El tamaño del sistema bancario español se redujo un 19% desde el máximo alcanzado en 2012, al disminuir el total de activos en 662.000 millones de euros. Esta reducción de tamaño se explica por la fuerte reestructuración sufrida por el sector por la crisis de las cajas de ahorro y que derivó en el empleo de dinero público para sanearlas.

No obstante, la disminución del tamaño del sector bancario español es porcentualmente menor que la del crédito, por el crecimiento de activos financiero de renta fija y renta variable desde 2008, según constata BBVA Research en su último informe sobre la banca a partir de datos del Banco de España.

El crédito al sector privado sufrió un desplome de 543.000 millones desde 2008, lo que supone una caída del 29% y representa el 50% del PIB de España. El servicio de estudios del BBVA aprecia que el desapalancamiento del sistema se mantiene, si bien el ritmo de caída "se modera" desde finales de 2013.