La empresa coruñesa de consultoría y tecnologías de la información Altia ya estuvo a punto de cumplir en 2014, con un año de antelación, su plan de negocio al cerrar el ejercicio con un beneficio de 4,5 millones, sólo medio millón menos de lo que tenía previsto ganar al finalizar 2015. Era prácticamente imposible que no cumpliese sus previsiones, pero ayer avanzó los datos provisionales sin auditar que el consejo de administración aprobó el lunes en la formulación de cuentas del ejercicio pasado y dejó patente que va holgada.
La firma que lidera el también presidente del Deportivo, Constantino Fernández Pico, obtuvo unas ganancias de 7,26 millones de euros durante 2015, un 61% más que el año anterior. La cifra supera en un 44% la prevista en ese plan de negocio, presentado en junio de 2014, una evolución que su presidente atribuye a la mejora del "entorno económico", que batió las "expectativas del plan de negocio", a la "maduración" de las inversiones y a la obtención de subvenciones por proyectos de I+D e ingresos por un valor total de 1,52 millones de euros. El beneficio no es la única variable que mejora lo previsto en el plan estratégico de Altia. La compañía cerró 2015 con una cifra de negocios (ventas) de 65,2 millones, un 17% por encima de lo proyectado y un 21% más que en el ejercicio anterior. De ahí que el beneficio operativo (Ebitda, por sus siglas en inglés) ascienda a 11,1 millones, un 17% sobre las ventas. La facturación supera un 55% la lograda en 2014 y un 33% lo proyectado por los directivos de la firma.
Con estos datos, Altia vuelve a batir su récord después de haber cerrado 2014 con un incremento del beneficio del 55%.
La consultora en tecnología ha tenido también una formidable evolución en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) en el que cotiza desde noviembre de 2010. Desde el arranque de 2016, ha avanzado un 17%, al pasar de los 12,4 euros a que cotizaban las acciones a finales de diciembre pasado a los 14,9 en que cerraron ayer.
Sextuplica su valor en Bolsa
El valor de la compañía en Bolsa asciende así a 100 millones de euros, por encima de Adolfo Domínguez, por ejemplo, y sextuplica la capitalización de 2012, cuando sólo valía 16.370 euros. Ya el año pasado se revalorizó un 36% y en este ejercicio mantiene el pulso a pesar de la volatilidad de los mercados europeos y especialmente de la Bolsa española. Ayer, cuando envió el hecho relevante al MAB con el informe preliminar de sus cifras, subió un 2,47%.
De acuerdo con los resultados obtenidos, el consejo propondrá a al Junta General Ordinaria destinar 1,7 millones de euros al abono de dividendos "en línea de ofrecer una retribución interesante pero dentro de una política prudente de autofinanciación". La fecha del pago la decidirá también la junta general.
