El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado a la baja su previsión de crecimiento para la economía mundial por segunda vez en lo que va de año (lo hizo ayer en dos décimas) y también ha recortado en una décima su perspectiva de crecimiento para España en 2016.

Según el FMI, España crecerá en 2016 el 2,6%, frente al 2,7% que pronosticó en enero, mientras que ha mantenido sin cambios su proyección del 2,3% para 2017, según refleja la nueva edición de su informe Perspectivas Económicas Mundiales.

El ajuste a la baja que ha hecho el FMI de su previsión para España es más suave que para la economía mundial en su conjunto. El FMI prevé que la economía mundial crezca el 3,2% este año (dos décimas menos de lo que dijo en enero) y el 3,5% en 2017 (una décima menos de lo que difundió hace tres meses). Esta corrección la atribuyó a "la pérdida de impulso en las economías avanzadas" y a "un nuevo episodio de volatilidad financiera" internacional.

La leve corrección de una décima en el pronóstico de expansión del PIB español en 2016 representa la primera revisión a la baja de las previsiones de crecimiento para España por parte del FMI desde agosto de 2013, pero se inserta en un empeoramiento general de las expectativas para el conjunto de los países desarrollados y también de la economía mundial.

A pesar de esta rebaja (la menor entre las economías avanzadas) España sigue destacando entre las grandes economías desarrolladas como la que cuenta con mejor pronóstico de crecimiento para 2016 y la segunda con mayor tasa de crecimiento prevista para 2017, sólo por detrás del 2,5% proyectado para EEUU.

El ministro de Economía y Competitividad en funciones, Luis de Guindos, sostuvo que España será la que más crezca de las grandes economías avanzadas. La economía española, dijo, ha entrado en este ejercicio con un crecimiento del 0,7% en el primer trimestre, según el Banco de España, y del 0,8% según analistas privados, un "buen crecimiento económico e inercial" que también se verá reflejado en unos "buenos" datos de empleo.

Los nuevos pronósticos de crecimiento para España del FMI se alejan una décima más respecto a las previsiones oficiales del Gobierno, que desde el pasado verano mantiene una previsión de expansión del PIB del 3% en 2016 y del 2,9% en 2017. Sin embargo, el Gobierno siempre fue mucho más optimista que el resto de las insticuiones públicas y privadas. OCDE, Banco de España, CEOE y Funcas prevén un avance de España del 2,7% este año: tres décimas menos que el ejecutivo y una más de lo que ahora dice el FMI.

A pesar del recorte en el pronóstico de crecimiento para España en 2016, el FMI ha mejorado su previsión sobre el desempleo y ahora espera que la tasa de paro de España se sitúe en 2016 en el 19,7%, dos décimas por debajo que su previsión de octubre, mientras que en 2017 el desempleo bajará, según sus cálculos, al 18,3%.

Los pronósticos del FMI auguran una caída de la inflación española del 0,4% en 2016 y un repunte de los precios a tasas positivas del 1% en 2017.

El FMI rebajó sus previsiones de crecimiento de EE UU en dos décimas en 2016 (hasta el 2,4%) y en una en 2017 (2,5%) y en la misma intensidad para la Eurozona, que avanzará el 1,6% y el 1,5% en ambos ejercicios. Para Japón recortó en medio punto la previsión para 2016 (hasta el 0,5 %) y prevé que vuelva a la recesión en 2017 (-0,1%). Por el contrario, mejoró en dos décimas su predicción para China, que avanzará el 6,5% este año y el 6,2% el próximo. El área de Latinoamérica y el Caribe se contraerá el 0,5% en 2016. Será su segundo año consecutivo en recesión, aunque en 2017 volverá a crecer y llegará al 1,5%. El Fondo sostuvo que una eventual salida del Reino Unido de la Unión Europea podría causar "graves daños regionales y globales".