La inmobiliaria española Martinsa Fadesa -que en su momento protagonizó el mayor concurso de acreedores de la historia de España- ha dado un nuevo paso en su proceso de liquidación al poner a la venta un lote de viviendas y suelos que salen al mercado con un precio mínimo conjunto de unos 106 millones de euros.

El grueso de esta nueva oferta de activos, la sexta que se lanza, lo forma un conjunto de parcelas de Arganda del Rey (Madrid) para construir bloques de viviendas libres y protegidas que se ofrecen por un total de 90 millones de euros.

Entre el resto de los activos que los administradores pretenden colocar figuran distintos tipos de viviendas ubicadas en las localidades madrileñas de Móstoles y Arganda del Rey, y en Mijas (Málaga), que suman unos 11 millones de euros, además de una parcela para construir un hotel, también en Arganda del Rey, por 4,56 millones, según consta en la página de internet habilitada para el proceso de liquidación de Martinsa Fadesa.

De esta forma, los administradores concursales de Martinsa Fadesa avanzan en el plan de liquidación de la inmobiliaria que emprendieron en septiembre de 2015 tras recibir el visto bueno del juez y después de que la compañía presidida por Fernando Martín incumpliese los plazos de pago previstos en el convenio de acreedores.

Este plan de liquidación de la firma establece que para colocar los activos que tiene en propiedad, inicialmente se pondrán a la venta por un precio equivalente al 70% del valor al que están registrados en el plan, con el objetivo de que sean atractivos para los posibles compradores.

En caso de que en esta primera fase de venta directa no encuentren comprador, o la compañía no reciba ofertas satisfactorias, el plan de liquidación prevé que los activos se vuelvan a sacar al mercado, pero esta vez a través de una subasta. La idea es sacar el mayor dinero posible de los activos para afrontar parte de las deudas que tiene pendientes la inmobiliaria.

La constructora que controlaba y dirigía Fernando Martín -resultado de la fusión de la madrileña Martinsa y la gallega Fadesa- se vio abocada a la liquidación al no poder refinanciar su deuda financiera de 3.200 millones de euros, ni pactar una renegociación del convenio de acreedores con el que en 2011 logró superar el mayor concurso de acreedores de la historia.

Los administradores que gestionaron la empresa durante aquel concurso vuelven a estar al frente de la compañía y son los encargados de tramitar y ejecutar el plan de liquidación.

En el anterior lote sacado a la venta por los administradores concursales había plazas de garaje, locales, viviendas, parcelas urbanizables y rústicas, además de terrenos en campos de golf repartidos a lo largo de toda la geografía española, entre ellos cuatro locales comerciales y nueve plazas de aparcamiento en A Coruña.

Entre las propiedades de mayor valor estaba un suelo en Las Palmas, por un mínimo de 39 millones, un suelo en desarrollo en la prolongación de la Castellana en Madrid por 5,5 millones, así como unas parcelas en el campo de golf de Jaca, por 2,5 millones, o el campo de golf de Aranjuez, por 3,8 millones de euros.