El grupo automovilístico alemán Volkswagen alcanzó un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos para evitar el juicio sobre los 600.000 vehículos diésel que incorporan en el país un software que altera las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx). Los clientes afectados serán compensados. La compañía informó de que el acuerdo no tendrá efectos sobre los procedimientos iniciados fuera de Estados Unidos y que no impedirá que sigan adelante las investigaciones en curso.