El XIII Plan Quinquenal de China prevé una reordenación de los sectores de producción de acero y carbón que afectarán a 1,8 millones de trabajadores cuyos empleos serán "reconvertidos" mediante una inversión estatal de 16.000 millones de dólares. Así lo expuso el embajador de China en España, Lyu Fan, en la conferencia con la que se cerró la asamblea del Instituto de la Empresa Familiar (IEF). "Tenemos que neutralizar el exceso de capacidad productiva, que es especialmente grave en la siderurgia y el carbón. Reduciremos sus producciones en los próximos cinco años en 150 millones de toneladas y 500 millones, respectivamente. No queremos mantener empresas deficitarias", apuntó. El embajador afirmó que "éste es un problema nuevo para nosotros pero la decisión es firme e irá acompañada de medidas concretas".