Un centenar de funcionarios de Hacienda y agentes de la Brigada de Represión de la Gran Delincuencia Financiera registraron en la madrugada de ayer las oficinas de la multinacional estadounidense Google en París dentro de una investigación por presunto fraude fiscal. Las autoridades galas acusan a la firma de evadir 1.600 millones y de actuar como una banda organizada de blanqueo.