La obligación de declarar a Hacienda los bienes y derechos situados en el extranjero mediante el denominado modelo 720 ha permitido a la Agencia Tributaria aflorar este año más de 13.700 millones de euros, lo que eleva hasta más de 140.900 millones lo declarado en los cuatro años de vigencia de la norma. Además, la información recopilada y las inspecciones han permitido ingresar 840 millones de euros.
Según explicó ayer el director general de la Agencia Tributaria (AEAT), Santiago Menéndez, los 13.700 millones de euros aflorados en 2016 se desglosan en 2.600 millones de cuentas bancarias y de crédito en el extranjero; más de 1.000 millones en inmuebles y más de 10.100 millones en fondos (casi 5.100 millones), acciones (4.800 millones) y seguros (250 millones).
En el acumulado de los cuatro años de vigencia del modelo 720, los contribuyentes han consignado como declarados por primera vez más de 140.000 millones, a razón de 91.300 millones en 2013; 20.900 millones en 2014; 14.900 millones en 2015 y 13.700 millones en 2016. Por tipos de bienes se han declarado más de 24.600 millones en cuentas, 12.100 millones en inmuebles y más de 104.000 millones en fondos, seguros y acciones. Menéndez indicó que el incremento del control del patrimonio en el extranjero por la creciente captación de información tributaria internacional "induce cada vez a más contribuyentes a cumplir la obligación, por lo que continúan recibiéndose declaraciones presentadas fuera de plazo para evitar las sanciones derivadas del incumplimiento". Así, el importe declarado en el modelo 720 correspondiente a 2014, con plazo ordinario de presentación hasta finales de marzo de 2015, ha seguido creciendo en los últimos meses. Igual sucede con todos los modelos a presentar en años anteriores, y, de hecho, mientras que dentro del plazo ordinario de presentación del primer año (2013) se recibieron 131.411 declaraciones, tres años después todavía se vienen recibiendo regularizaciones de ese primer ejercicio, que ya suman casi 136.500.
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Además, Menéndez explicó que toda esa información, a efectos de comprobaciones presentes y futuras, sigue nutriendo la base de datos de la AEAT, que continúa con el análisis de los más de 7.000 contribuyentes preseleccionados para comprobación inspectora por no haber presentado el modelo 720 debiendo hacerlo, de acuerdo con la información de que dispone la agencia tributaria, o bien por haber efectuado la declaración de manera incorrecta. Hasta la fecha, un millar de contribuyentes han sido cargados en el plan de inspección, sobre los que se encuentran en curso algo más de 1.100 actuaciones, de las que en 436 casos se han emitido ya actas o expedientes sancionadores.
Desde 2013, primer año de presentación del modelo 720, Hacienda ha realizado más de 8.800 actuaciones inspectoras que han generado, en términos de deuda instruida, 1.100 millones de euros, de los que están liquidados ya casi 840 millones. De esos millones, 815 se corresponden con 3.300 expedientes, con una cuota media liquidada de más de 246.000 euros por expediente.
